Sentir, entender, permitir, acompañar, tener herramientas para desplegar, fluir, vibrar, poder...
Entrar en contacto con la naturaleza femenina es sumergirse en aguas profundas, es aprender de nuestros aspectos más primarios, más salvajes, es adentrarse en una aventura digna de ser vivida en estos cuerpos nuestros de mujeres que somos,
mujeres que crian, que aman, que cuidan, que escuchan, que reciben, que se entregan, que celebran, que se apasionan, que sufren, que lloran, que se confunden y se pierden y se rencuentran tantas veces como sea necesario...
El Poder de la Mujer es ser Mujer!