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Respuesta  Mensaje 1 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait  (Mensaje original) Enviado: 28/11/2011 21:57
Ichi-Chiku

La lluvia se deslizaba por los contornos de su rostro y hacia un sonido hueco contra el techo de las casas en el distrito noble. Era una increíble estructura llena de luces y parada justo delante de los ojos verdes que la observaban estupefactos, dejándose empapar por la lluvia. Su cabello rubio se adhería a su piel y sus dos brazos reposaban junto a su cuerpo. Esa era su casa, su antiguo hogar. Los recuerdos de su padre inundaron su cabeza al recordarlo. Las risas del mayordomo rubio también. Sus pupilas se deslizaron lentamente hasta observar la puerta de entrada que se abría con lentitud y de allí asomaba uno de sus antiguos sirvientes. Lo miró y lo reconoció al instante. Como olvidar al pequeño RD? A pesar de su edad madura ninguno de los miembros de su familia podrían nunca olvidarlo. El viejo sirviente se quedó mirando al rubio bajo la lluvia un momento, todo su kimono empapado, su cabello que caía a su pálido rostro y sus ojos brillantes. Negó lentamente con la cabeza, Hisoka sabía lo que eso significaba “Aún no puedes volver”, y dio media vuelta para introducirse en la mansión, cerrado la puerta a sus espaldas. El rubio se vio a si mismo pensativo, ¿porque cada madrugada caminaba hasta allí? y esperaba a que alguien saliera para que le dijera “no” una y mil veces.

Las sandalias de madera en sus pies comenzaron a caminar en dirección contraria a la casa, dirigiendo sus piernas con calma y manteniendo la cabeza gacha. Hoy no había podido encontrar lugar donde pasar la noche, no había encontrado a un hombre que le diera la cama a cambio del cuerpo… el hambre en su vientre y la falta de energía se hizo presente cuando decidió recargar su cuerpo pesadamente contra un árbol, las calles no eran muy transitadas pues estaban dentro del lugar donde vivían solamente sacerdotes y nobles. Y a las cinco de la noche… quien podría encontrarse dando vueltas? A de ser alguien como él solamente, nadie más podría. Peinó con sus dedos el cabello hacia atrás y trató de normalizar su respiración, pues de otra forma comenzaría a llorar como un niño. Sus ojos pensativos miraban como la lluvia caía constante al suelo, explotando contra la superficie y separandose para deslizarse por todo el piso en forma de charco. De un momento a otro cuando no tenía más por hacer que quedarse allí dormido, levantó su vista sorprendido. Psyché, una psyché… volaba dificultosamente, intentando llegar hasta él, o hasta el árbol, no estaba seguro. El rubio entreabrió sus labios, sorprendido de la tenacidad de aquella que se veía tan frágil. Que hasta una gota de agua podría derribarla. Sin embargo, la psyché luchaba a pesar de que sus alas estaban siendo empapadas y su cuerpo se ponía más pesado por la humedad. Cuando finalmente llegó el rubio dejó que se posara en su mano cuidadosamente. Colocando su mano libre sobre ella simulando un pequeño techo sobre su cabeza para que el agua ya no la rozara. Hisoka sonrió tiernamente - …ya está pequeña… - murmuró, notado como la mariposa movía sus alas lentamente, incómoda por el agua que la había alcanzado. Los ojos verdes del muchacho se mantenían fijos en ella, notando su esplendoroso color amarillo… sus manchas albinas y rayas almendradas. A los ojos del rubio ella era realmente hermosa. Exhaló recargándose en el árbol con más comodidad - …tu tampoco tienes lugar donde dormir? – murmuró. Quien lo observara pensarían que estaba loco, hablando con algo entre sus manos, más presisamente una mariposa. Sin embargo aquello no le importaba ya, ella lo comprendía… ella tenía frío, como él y estaba empapada, como él.
 



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Respuesta  Mensaje 8 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 21/12/2011 20:17
. . . . . .
Ups disculpa esas letras negras, mi computadora anda algo extraña :/ o el codigo esa sucio hum
ah y por cierto Tammy amo todo lo que piensa Delrösch, no lo anoto en donde van las frases
porque simplemente es demasiado! llenaría el tema de frases de Delrösch jaja pero que
sepas que muero de ganas por escribir una y tarde o temprano no me podré contener.
A y no sabia si avanzar más por si hacias algo antes de llegar a su destino entonces
lo dejé ahí, espero que no te moleste, Hisoka esta calladito porque mucho no lo conoce~ :3

Respuesta  Mensaje 9 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 09/02/2012 20:55
Había perdido la cabeza. O la lluvia había aguado sus instintos. 

Como fuera, no entendía porqué aquella parte de su cerebro que normalmete se encuentra alerta en todo momento, y le dice 'atención, persona potencialmente dañina' estaba actualmente de vacaciones. Porque, oh, parecía estarlo. Aún con Nichts ese mensaje estaba, aunque fuera para cuidarse de los momentos de aburrimiento del rubio, pero estaba. Con sus padre estaba, con sus aprendices, con sus shattenmaskes, y en especial con su propia madre. 

Porque todos son potencialmente peligrosos. Pero si es así, ¿por qué este chic--Hisoka, porque Hisoka era diferente? La mariposa que había estado con el más bajo pasó frente a su nariz, dejando su aroma a lantana mezclado con otro en el camino, antes de esconderse entre sus ropas. 

¿Podía ser el aroma de Hisoka? 

El constante latir y el calor que sentía en sus heridas solo lograban acentuar el frío en sus extremidades, en especial en sus hombros y rostro. Bajo su aún presente máscara, no dudaba sus mejillas estaban sonrosadas. ¿Cómo estaba Hisoka? Lo más probable que con frío. Por primera vez deseaba después de muchos años saber como lucía una persona. Le parecía usaba un kimono, pero no lo había tocado por mucho para saberlo ocon exactitud. ¿Cómo estaría su ropa, ceñida? ¿Cómo sería su expresión? No se sentía en potestad de tocar, y su psyché ya no estaba sobre él para determinar su posición exacta, o su temperatura. 

Solo sabía que Hisoka se mantenía a su lado por el sonido de sus pasos a través del agua, su respiración suave, su presencia a su lado, y las gotas cuyo descenso interrumpía. 

En la cercanía, el letrero de madera tallado con cuidado, leía "Tsukihime". 

Amaba la lluvia, no le importaba mojarse, pero sintió un verdadero alivio al finalmente llegar a la posada.Detuvo sus pasos, manteniéndose estático frente al tenuemente iluminado lugar, el cambio de temperatura, la suaves risas y amena música enmarcada por el vapor de aguas termales le indicaban que era el lugar correcto, y que este se mantenía como otro hogar. Hace mucho que dejó de desear saber, realmente saber, como lucía el pequeño cuartel shattenmaske albergado en el Cardinal del Fuego. Sin más, corrió con una mano la tela que cubría la parte superior, un movimiento practicado, y entró sin mirar a Hisoka, sabiendo que seguiría. 

"Delrösch-sama!" Suspiró, y cerró un párpado ante las fuertes y sincronizadas voces de las mujeres y hombres en el interior, bastante distantes del silencio de la noche. Asintió respondiendo el saludo, y tenía las increíbles ganas de reír ante el absoluto chaos organizado que parecía haberse desatado, apoyado por la repentina sensación de seguridad que le embargó. Llegar a cualquier posada de la fuerzas tenía ese efecto en él, pero en el tsukihime era casi tan fuerte como la base general en el cardinal del agua.

"De mi confianza, por favor." Señaló con una mano a Hisoka, y sintió los pasos rápidos de Tsuguruhime, una de las más jóvenes, correr hacia Hisoka, sin duda con toalla en mano. Cerró ambos párpados al detenerse unos pasos más pesados frente a él, y una toalla caer en su cabeza. Motochika refregó su cabello dos veces fuertes y luego de forma más amable, primer en reprimenda y luego en bienvenida. 

Criajo.

"Ya estás herido. ¿Vejez?" Dijo Motochika, sus malditas palabras envueltas en calidez.

Doble criajo. 

"Es conocido como 100% de efectividad, Motochika. Algo que estaría bueno aprendieras de una vez, ¿hm?" Devolvió, abriendo sus párpados, detenido en la entrada junto a otras tres personas, gotas de lluvia mojando la piedra que tras un escalón cambiaba a exquisita madera. 

"Motochika-kun!" Le retó Tsuguruhime, que parecía tener 60 en vez de 14 años, pero podía sentir la sonrisa jugando en las comisuras de sus labios."Delrösch-sama, por favor. Um, gomenasai, su nombre?" Le preguntó la chica a la otra chica (Hisoka, cough), que se veía bastante bonita, con una linda piel, y con un color de ojos preciosos a su parecer. ¿Sería alguien especial para Delrösch-sama? Y mientras ella preguntaba, Motochika había desatado y quitado el calzado del ninja, mientras una tercera persona, que por la tonada de pasos inseguros determinó era Hoji, depositaba frente a ellos zapatillas secas para ponerse. 

La mariposa de Hisoka (ya no podía llamarsele de otra forma) salió de entre sus ropas, se posó sobre el calzado derecho,y luego sobre el izquierdo, permitiéndole a Delrösch saber la posición y colocárselas. Luego voló hacia donde estaba Hisoka, revolotenado frente a su rostro, luego posándose en las zapatillas que le correspondían, quedándose ahí.

"Arigatou, minna-sama." Deru usaba las palabras que en el Tsukihime acostumbraban a usar, a modo de cariño. Y siguió a Motochika, que ya les guiaba hacia la destinada habitación. Tsuguruhime iba con Hisoka, y Motochika le susurraba que lo más propable era que Tsuguru hubiese creído que Hisoka era una chica, ergo la única habitación pedida, jóvenes mentes entre poco e completamente inocentes de hoy, ¿lo cambiamos Delrösch-sama?, ¿no?, a sus órdenes, ya nos hicimos cargo de la sangre, debimos llevarnos el cuerpo, discúlpenos taicho.

Y se retiraron ambos a reportarse con Oichihime, jefe del cuartel. 

"Hisoka," Comenzó, llendo de memoria hacia las puertas corredizas, arrodillándose, talones tras sus glúteos, su postura recta sino es que tirando las puntadas en sus muslos, y posó sus manos, corriendo la puerta de madera y papel, luego la otra, y suspiró, respirando de forma profunda el vapor de agua que liberaban las aguas termales ahora frente a él."Aquí estás a salvo, Hisoka. Bienvenido. No me corresponde, pero por favor, siéntete como en casa. Mientras quieras quedarte aquí, así será." 

Es lo que menos puedo hacer para agradecerte, quedó sin decir, pero esperaba no hubiera necesidad. 

Se deslizó en tal posición hasta quedar en la terrazade madera, y comenzó a dejar las armas visibles a un lado, desabrochó el cinturón, y comenzó a quitarse la parte superior del traje, psychés despertando de su sueño y saliendo a revolotear, rodeando su cuerpo, su aleteo aletargado pero confortable. Delrösch se quedó con la camisa apretada que cubría su torso y escondía su rostro, y la bajó, permitiendo una sonrisa danzar ante las niñerías de sus compañeras, unas cuantas queriendo quedarse dormidas en su cabello. 

"En el closet hay ropa seca, y dentro de un rato traerán cena. Adelante."

Se quitó la pechera negra, de espaldas a Hisoka, dejando mostrar una quemada marca en el centro de su espalda, a nivel de las escápulas. La dobló de forma cuidadosa, dejándole sobre la parte superior que yacía prístia sobre las armas dejadas anteriormente. Y luego ya no importó, estaba demasiado cansado como para poner más cuidado, las importantes eran sus psychés, y se puso en pie caminando a las aguas termales, unas cuantas psychés escapando de entre su cabello ante la temperatura, deslizó un pie, luego el otro, y se dejó caer con toda la gracia que le permitió su cuerpo dentro de agua, la parte inferior de sus ropas apegándose aún más a él de ser posible. Luego, sus muslos gritaron, y así mismo hizo Delrösch bajo el agua, largo y profundo, el dolor por temperatura negando el dolor de la inflamación.

Y se quedó ahí, sin sacar su rostro del agua, el Koto sonando dulce entre las estrellas.
___________________________________
*Koto - instrumento japones
Y yo llego tarde y no hay excusas )TESIS TESIS TEEEESIS Y no internet donde estoy!! porque perdi mi celular con inter y no puedo conectar!! ciber que cobra mil y ya me queda solo media hora!! ahah, sirve?) A cambio, le he traido un post mega largo, que espero acepte y ame y ya quiero ver su respuesta. El domingo tengo internet seguro!! Vuelvo a casa )solo para partir de nuevo? ahah que horror. pero bueno, ahi me voy a Machu Picchu, asi que feliz!!) La verdad es que se que interactue poco ahora con Hisoka, PERO, me gusta el escenario que tenemos ahora.. para jugar... ke ke ke. Haii? *lo apachurra* La marca es la que esta en la bio de Deru Deru.. lov you!! *rushes*

Respuesta  Mensaje 10 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 12/02/2012 19:39
"Tsukihime".

¿Una posada? ¿Aquí quería traerlo él? que agradable de su parte, un lugar donde podría pasar la noche si conseguía algo de dinero para poder entrar y quedarse. Sin embargo él no se fue sencillamente dejándolo a su suerte como cualquier otro hombre lo haría, entró permitiendo que rubio lo siguiera suavemente con pasos gráciles dignos de un príncipe contrarrestándose con su vestimenta sugerente, estirando sus manos delicadas y rozando apenas la espalda ajena... para hacerle sentir que estaba allí, o más bien para hacerle saber que estaba con él pues temía que al verlo alguien pudiera reconocerlo y echarlo del lugar por alguna razón. Ignorando el poder tan grande del shattentaicho, aunque atento a cada movimiento. Él era realmente muy impresionante al caminar tan tranquilo por el camino de la oscuridad que vivía en sus ojos, sabiendo cuándo y dónde sin la necesidad de ver. La calma, las suaves voces a su alrededor y el vapor escapando de algunas esquinas le hizo entender que era realmente un lugar para gente que podía pagarlo, que podía mantener su estadía allí. Al mismo tiempo se dio cuenta que el moreno era conocido en el lugar pues se mencionaba su nombre como si lo hubieran estado esperando hace tiempo.

"De mi confianza, por favor."

¿Que había querido decir? pensó al verse señalado, sorprendiéndose sutilmente al ver a una chica aproximándose a él tan apresuradamente. Hisoka no supo exactamente qué hacer cuando se encontró justo delante de él…"(…) su nombre?" la observó con los ojos esmeralda brillante, serenos, asentados en ella de forma fija, realmente tenía un mirar diferente - Mucho gusto – asintió haciendo una leve reverencia con la cabeza sin inclinarla mucho - mi nombre es Hisoka.. - murmuró una voz juvenil, limitándose a callar su apellido... por ahora. Amablemente tomó la toalla entre sus brazos y se calzó abandonando sus sandalias, siguiendo a las dos mujeres que parecían en cierta forma "camaradas" de Delrösch-sama.

"Hisoka," oyó su voz y entrecerró sus ojos al saber que era él, tan suave… - ...si? - murmuró con la suavidad del viento, repitiendo los movimientos del ninja, sentándose de igual forma... expectante al paraíso termal que se abría frente a sus ojos. "Aquí estás a salvo, Hisoka. Bienvenido. No me corresponde, pero por favor, siéntete como en casa. Mientras quieras quedarte aquí, así será.". Atónito, sus labios se entreabrieron y sus ojos sobrecogidos hicieron una expresión que de haberla visto se sentiría avergonzado de la misma, siendo tan grácil y fino no podía permitirse actuar exageradamente. Aunque de todas formas a veces no podía evitarlo. ¿A salvo? ¿Sentirse como en casa? sus manos presionaron fuertemente la toalla... sus ojos brillaron por un momento. Él... le estaba dando un hogar así... gratuitamente? - ....D-el..rösch-sama... - solo pudo musitar y cubrió su boca rápidamente, bajando la cabeza debido a que esa palabra le había salido con una voz extraña y temblorosa, una voz que indicaba su pronto llanto. ¿Existen personas así, que den tanto a cambio de nada? porque no encontraba la razón por la cual lo había llevado allí, curar su herida era algo… que cualquiera hubiera hecho en su lugar... ¿no era así?

Quiso decir algo, quiso preguntar "¿por qué?" pero solo pudo levantar sus ojos para verlo pasar. El rubio tragó saliva antes de inclinar la cabeza hacia abajo, ruborizado, haciendo una reverencia extrema incluso posando su frente en el suelo tratando de mostrarle respeto - muchas gracias por favor... si hay algo que puedo hacer... - murmuró. ¿Por qué debía hacer algo a cambio? para él lo más común era venderse a cambio de dinero, abrigo o comida y estaba dispuesto hacerlo sin embargo él continuo sorprendiendo a Hisoka, haciendo que levante la cabeza para mirarlo "En el closet hay ropa seca, y dentro de un rato traerán cena. Adelante." ¿Cena?... este era realmente su día de suerte. Le siguió, afirmando con la cabeza al oírlo, deslizándose con sutileza, empujándose con sus delicadas manos y corriendo la puerta para cerrarla. Algo de intimidad... después de todo él estaba quitándose la ropa frente a sus ojos. Dejando un lado sus armas, revelando parte de su cuerpo, descubriendo su boca... psyché?...

Dudó un momento al ver la marca en su espalda esperando que no lo haya notado, una psyché... se veía como si hubiera sido grabada a fuego en su piel, pensar en el dolor que aquello sería para alguien como él. Mantuvo su rostro casi estupefacto, hipnotizado con él hasta que se metió a las aguas. De alguna u otra forma no podía evitar pensar que aquel hombre era dotado de una belleza impresionante, que aquel hombre era... terroríficamente atractivo. ¿Cómo..? ¿Cómo podía pensar en esas cosas cuando él había sido tan buena persona? intentó ponerse serio, poner por lo menos un rostro normal - ..gracias.. en serio gracias... - agradeció una vez más poniéndose lánguidamente de pie... observándolo en el agua. Sintiendo la música en el ambiente, desconociendo el instrumento... o quizás no recordándolo en ese momento. Precisamente en ese momento (…)

Caminó sutilmente hasta él - ....es significativo para mi tener un lugar donde descansar... - murmuró. Su voz era imposible, no interrumpía al ambiente, parecía como si la propia naturaleza hubiera tomado su voz y la hubiera vuelto algo simplemente natural, parte de ella, tolerable a los oídos aquellos que saben oír. Realmente Delrösch-sama era lo que la gente decía... alguien que aunque no tenía el saber de la vista era, sin embargo, tan liviano y alerta como si tuviera ojos delante y detrás de la cabeza. - Delrösch-sama... - susurró suavemente mientras que con una tersa suavidad introducía desde la punta de uno de sus pies.... hasta meter ambas piernas... mojando la tela de su kimono que lo acompañaba al agua. Los ojos impúdicos del rubio lo observaron mientras sus manos tomaban los extremos de su propia tela y la deslizaba hasta retirársela del cuerpo y hacerla a un lado... - puedo acompañarlo?... - susurró, sus mejillas algo rojas, quería pensar que era debido al calor. Con gracia introdujo el total de su cuerpo en el agua que enardeció su piel de tal forma que se sintió raro al recordar lo bien que podía llegar a sentirse esa sensación, esa sacudida que le provocaba… esa reacción involuntaria en él. Posó su cabeza suavemente en una piedra a descansar y no pudo evitar esbozar una suave sonrisa al cerrar los ojos.

Recordaba que su padre había estado allí para explicárselo, alguien que veía las termas como un ritual de purificación y relajamiento. Él le había dicho que el agua caliente se usaba para ayudar a relajar los músculos, purificar el cuerpo y el alma. Cuando era niño solía pensar que era increíble imaginar que personas de clase alta, sin preocupaciones y sin estrés alguno más que disfrutar de sus riquezas, pudieran gastar hasta millones para entrar a lugares así. Ahora... ahora entendía a su padre, realmente sentía como si el agua se llevara cada peso de su cuerpo... levando una de sus manos, observando sus largos y estilizados dedos con calma... realmente estremecía su piel. Sin duda alguna... su alma estaba siendo agasajada. Deslizó aquella mano en una de sus piernas lentamente, observando el recorrido de esta… dirigiendo sus ojos de reojo a quien lo acompañaba. Él también parecía completamente ido… alejado de la realidad - …usted… - interrumpió el silencio que había durado hasta entonces, aunque su voz no era molesta - … ¿usted sabe quién soy? – murmuró mojándose el cabello con tranquilidad. Después de todo la gente de alto rango sabía perfectamente de su apellido y su historia familiar, sabían que lo habían desheredado, sabían porque ellos querían tratarlo como se lo merecía un mendigo abandonado y debían saber de su desdicha para comentarlo a otras familias. Pero la gente común, por así decirlo, muchas veces ignoraban su pasado si no comentaba su apellido. Delrösch era realmente alguien a quien podía considerar lo suficientemente hábil para saberlo…


. . . . . . .
(la sangre perdida durante la lectura esparcida en todo el teclado de la notebook) oh..shit eso fue hipnotizante +_+ ddderu saca..sacandose la ropakjshkjahslakjs >< santo cielo tuve que leerlo como tres veces para saber que poner no podía evitar pensar "entonces hisoka le salta ensima" era lo único que se me ocurría las primeras veces x//x Tammy! si vas a disculparte así conmigo dandome este post tan largo pues tarda lo que quieras!! realmente me sirvió para entender más el ambiente de Delrösch y sus alrededores, además me encantó fue divertido leerlo XD jajajaja Hisoka mujer! que mala eres... hiciste que vuelva a entrar a esa bio infernal a verle el lomo >//> *orgasmkjsa* yo entiendo, entiendo que estes ocupada me da mucho gusto que hayas podido responderme ya lo extraba (L) y a mi tambien me encanta el escenario que tenemos! -abrazo- +w+ jugar? akjshajsakjs porfavor tammy no me hagas perder la cabeza antes de tiempo uwu XD jajajaja tengo que mantenerme con calma para no saltarle ensima aunque.. las intensiones estan inevitablemente >>

Respuesta  Mensaje 11 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 01/03/2012 04:17

Sumergido bajo el agua, su mente reproducía la melodía que era su nombre en labios de Hisoka. Apretó sus párpados, pero el sonido no se iba. Se levantó del agua, sin dirigirse al chico, dejando las gotas de agua termal deslizarse por su rostro, por la punta de su nariz y cabellos, hasta reunirse con el agua alrededor de su desnudo cuerpo. Sintió dos más rodar sobre sus labios, y las lamio lentamente, saboreándolas.


Eran dulces.


"No tienes nada que agradecerme. Estamos a mano." Dijo, un hecho, nada más ni menos que leer. No era un sujeto que aceptaba ayuda fácilmente, y menos habiendo estado tan vulnerable pero consciente como lo estuvo con Hisoka.


El chico entró al agua, mientras que las emociones de Delrösch se elevaron. La verdad, es que nunca nadie había compartido este baño con él. Nadie, ninguna de sus cuidadoras cuando pequeño, ni cuando estuvo herido de gravedad, ni cuando dejó de moverse, ni esto, ni aquello. Ni siquiera Nichts, ni Motochika, ni otros de sus Shatten, ni su padre.


La revelación enfrió esas emociones, mas la sensación de calma que emanaba Hisoka era como una suave sábana sobre sus hombros, su cabeza, y le pareció era tan dulce como el agua. 


Cerró tranquilamente sus párpados esta vez, y adoptó posición seiza, como si estuviera meditando (lejos, lejos de hacerlo, ya no podría concentrarse esta noche), una posición cómoda para él, una a la que estaba completamente habituado.


"Hm?" Resonó en su garganta. Alzó su mano, y tomó con habituada práctica, con sencillez, unas hojas rojizas de la planta que a su lado se encontraba. Las remojó en el agua por unos segundos, sabiendo atento Hisoka a su respuesta, luego, bajo el agua, las comenzó a suavizar con la yema de sus dedos."Hisoka RD."


Las sacó del agua, y habían tomado un color anaranjado oscuro, desprendiendo un aroma parecido a la muña, mas suave que la menta. Sintió el aroma, y las comenzó a moler con la punta de ssu dedos, en línea, siempre en línea, como si un cuchillo pudiese ser un mortero. Se detuvo, como si algo fue de especial atención.


"Discúlpame. Debería decir feuermaske Hisoka Russell Delivelance, miembro del escuadrón Trois del Cardinal de fuego, a cargo de la Feuertaicho Kanon." Continuó moliendo, asintiendo levemente, más bien una inclinación de su cabeza, sus cabellos humedecidos siguiendo con dificultad el movimiento. Tomó un poco de muña en su dedo, y la comenzó a repartis sobre donde sentía su cuerpo raspado. Luego, ayudándose con una sola mano, la otra con hierba en palma, se sentó en el borde de piedra, y comenzó a quitarse el vendaje sin dificultad, soltándolo lo suficiente como para dejar los puntos a la vista. Expandió la rotura de sus pantalones; no habría tenido poblema en quitárselos, no le importaba mostrarse frente a otros, ya era costumbre, entre guerreros y acompañantes siempre lo es, y sus manos le decían que no era físicamente displacente, pero lo hizo en honor a Hisoka. Desconocía si ello podía incomodarle, y el pasado no siempre siempre nos define, o permite predecir una reacción. Comenzó a poner muña alrededor de la herida.


Quemaba, aún más que las termas sobre sus fríos miembros, pero solo se permitió un largo exhalo de aire. No se merecía más.


Luego puso un punto de muña con su índice sobre su nariz, y se giró hacia Hisoka, extendiendo su brazo hacia adelante, su palma hacia el fente y arriba, su dedo con muña en la punta, indicando que quería hacer lo mismo con Hisoka.


"Es muña. Relajará y evitará cualquier resfriado, Hisoka. Hm, Hisoka-kun, disculpa mis modales, siendo donde nos encontramos." Elevó un poco su rostro, y lágrimas de aguas termales recorrían su dañado cuerpo. Esta agua contenía restos de muña, estando mezclada constantemente con la planta. 


Esta habitación era la que siempre reservaban para el Shattentaicho. Si no se encontraba él, no era permitido a nadie más entrar. Tres luciérnagas iluminaron el lugar, y uno se alejó para bailar con una psyché. Delrösch, en la misma posición, permitió que la danza llenara sus sentidos, suave y prometedora.


"Podría decirte más, pero eso no es quien eres, Hisoka-kun. ¿No es así? La única verdad, es que todo lo que puedo saber de ti, fuera de esta noche, y de aquella vez (una sensación, entre máscaras y oscuridad, iridiscente, inminente), me dicen nada de ti."


Y la luciérnaga danzante bajó a una piedra, y la mariposa le siguió. Ahí, la luz tintineaba, al igual que el leve batir de alas.


"Dime, Hisoka-kun. ¿Quién eres?"
_____________________________________________________________
Me tardé, porque nada parecía lo suficientemente bueno. Aún creo que no lo es, pero ya no puedo seguir teniendo 
esto abierto y esperándoteeeeergg *seppuku* Me alegra te hayan gustado los alrededores--wait, yo mala? Nevah! 
OBSERVA MIRA Y REGOCIJATE con el huashalomo washón muahahha, y yo entré y me leí y releí la bio de 'Soka! De todas 
formas, pido disculpas si me equivoqué de escuadrón orz, y el apellido estaba escrito como "Deliverance", y luego 
"Delivelence" tons OTL OTL OTL. *doble seppuku* aers quien salta sobre quien HUHUHU, ...HUHUHU!! Y ya no sé a donde 
llevarnos con esto XD? *se muere*


Respuesta  Mensaje 12 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 14/05/2012 05:31
¨Estamos a mano.¨

No, no lo estaban. Era demasiado por una simple herida... o quizás, parecía demasiado, porque lo extrañaba demasiado. Una vida normal. Apagando el frio, la lluvia, el hambre... todo por sanarte? demasiado poco te he dado, pensó para si mismo mientras observaba su rostro blanco y perfecto, casi inexpresivo. Algo completamente seductor a ojos de Hisoka.

"Hisoka RD." abrió un poco más sus ojos al ser reconocido por su apellido. Observándolo algo sorprendido por la precisión exacta de sus palabras. Él algo hacia con sus manos, parecía intentar sacar algo de aquella hoja... el olor era característico... los ojos verdes reconocían aquella planta. "Discúlpame. Debería decir feuermaske Hisoka Russell Delivelance, miembro del escuadrón Trois del Cardinal de fuego, a cargo de la Feuertaicho Kanon." continuó, con la misma precisión con la que había comenzado. Se sentó en el borde de una piedra para atenderse con la muña que había extraído. Hisoka se sonrojó un poco, tal vez, debido a tener que ver eso repentinamente. Pero... si él estaba completamente desnudo, porque habría de sonrojarle ver a su acompañante en la misma situación? después de todo estaba acostumbrado a ver toda clase de personas desnudas frente él... haciendo cosas repugnantes, en situaciones asquerosas. Pero aún así... se hundió un poco en el agua, cubriendo sus mejillas... su nariz.. pero no sus oídos ni sus ojos... quería seguir oyéndolo.

Luego se colocó un poco en la punta del dedo y suavemente se dirigió hacia él... "Es muña. Relajará y evitará cualquier resfriado, Hisoka. Hm, Hisoka-kun, disculpa mis modales, siendo donde nos encontramos." habló, mientras el rubio apenas sacaba el rostro del agua para acercarse a él... casi gateando. Confiando en sus palabras, después de todo... era un buen hombre. Era un buen hombre...

"Podría decirte más, pero eso no es quien eres, Hisoka-kun. ¿No es así? La única verdad, es que todo lo que puedo saber de ti, fuera de esta noche, y de aquella vez, me dicen nada de ti."

¨Me dicen nada de ti.¨

¨Nada de ti¨ sus palabra resonaban en sus oídos mientras entrecerraba los ojos y se arrimaba al dedo ajeno para deslizar suave y lentamente la punta de su nariz en él. Observando a Delrösch-sama... tan fijamente como podía. La mano ajena aún no se iba, no se alejaba del rostro del rubio. "Dime, Hisoka-kun. ¿Quién eres?"

¨¿Quién eres?" pensó - ¿Quién soy? - murmuró silenciosamente, rozando en la palma de la mano ajena, los labios.... abriéndolos ligeramente. De seguro aquello sorprendería a su anfitrión, a su ahora héroe, pero quería decírselo... quería decirle quién era en verdad. Y no encontraba forma mejor para hacerlo.

La suavidad de los labios del rubio lograron relajar la mano ajena hasta abrirla, permitiéndose sentir quizás como un reflejo ocasionado por la sorpresa, la inquietud de saber que está haciendo el otro. Sus labios apenas se presionaron contra esa piel, deslizándose lentamente hacia arriba... hasta rozar sus dedos, provocando que toque su boca. Sus labios entreabiertos, los ojos impúdicos del rubio observaban tan fijos como ensoñecidos a los ojos ajenos, La danza entre la luciérnaga y la mariposa... la lluvia fuera del lugar. El hecho que fuera madrugada. Todo parecía jugar a favor de esas sensaciones que provocaba el rubio.

Y tan pronto como llegaron esas caricias a la mano ajena.. se fueron. El ojiverde se alejó, un poco nada más... - Soy.... - murmuró, entrecerrando sus ojos al hablar - ....alguien que... - la vergüenza inundaba su corazón una vez más. Pero inexplicablemente sentía grandes deseos de decírselo y de hacerlo... relamió sus labios antes de continuar. Arrimándose... lentamente a Delrösch. Arrodillándose en las aguas - ....entrega su cuerpo a cambio... - murmuró cuidadosamente, tomando con suma templanza y delicadeza.... aquella mano a la que había arrimado a su boca. Cerrando sus ojos con calma, continuando - ....de un lugar... de alimento... de dinero... - posó la mano ajena con lentitud sobre su propio vientre... para que Delrösch pudiera sentir la temperatura de su cuerpo en comparación con el agua, el cuerpo de Hisoka quemaba.

Volvió a abrir sus ojos con suavidad, entreabriendo sus labios, sin apartar la mano ajena de aquel lugar. Haciéndole sentir su respiración, los movimientos característicos de encontrarse vivo. Elevó apenas su rostro - y yo....quiero dárselo.... quiero que usted.... obtenga esto de mi...quiero... agradecérselo así... – susurró - ..si usted… me lo permitiera… - murmuró, dando un punto final a sus palabras.

Su cuerpo arrodillado en el agua que cubría solo hasta el límite de sus caderas y la pelvis. Sin permitir dejar ver más. Ambos brazos en la misma posición: sosteniendo la mano del Delrösch en su vientre mojado, plano y extremadamente suave. Sus ojos filosos, impúdicos, brillantes… de un color completamente increíble. El cabello rubio hacia atrás, caía costosamente a su rostro, aunque con lentitud… ese cuerpo se mantuvo ahí, esperando un sí… como respuesta o la nada misma.. debido a la sorpresa de sus palabras.

. . . . .
Creo que yo salto sobre él akjshajsas *¬* hdfkdsjf disculpa la tardanza por favor Tammy querida :$ hace tiempo que no andaba por acá por problemas emocionales y viajes, muchos viajes, hasta me descalificaron de los concursos donde estaba inscripto pues.. verás, ni si quiera podía pasarme para responder asi que pido mil disculpas y espero, ESPERO POR DIOS que te guste el post! aunque se bien que debo haber dejado a deru en shock X//D en su primer encuentro, a Hisoka le gusta... es la razón secreta por la que se quiere dejar no es tanto por agradecerle *lodescubre* OMG jajajaja. Oh y que raro, yo y mis errores, es Deliverance U//U lo siento. Y donde llevamos esto? omg ajskhgdjsd pues ya habíamos hablado a mi me gustan como pareja además mi hisokita ya esta solo hace tiempo y bueno u//u es normal que pasen cosas sexys entre parejas no te preocupes hjaksgjas X//DDD agregaré: me encantó su post U-U me dió pie a mi para tocarle la mano con los labios y ashjgaks imaginarlo es... u_U *sangre*

Respuesta  Mensaje 13 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 26/06/2012 22:23
Internamente se sobresaltó al sentir su dedo sobre la piel del otro, muña o no. El contacto parecía quemarlo. Y ahora sus labios, su respiración --

-- cada músculo aumentó ínfimamente su tensión, y su corazón bombeaba más rápido en lo que parecía ser un atentado contra su propio cuerpo. Sentía como el aire alrededor había cambiado, las sensaciones había cambiado, el chico frente a él era alguien más.

No, no. Este chico con tal voz, seductora y versada en el placer, era el mismo. Después de todo, una moneda tiene dos caras, pero sigue siendo una moneda. Este es Hisoka RD.

Sin cambiar su expresión, permitió que su mano fuese llevada, y notó la marcada delicadeza del movimiento, y luego, ardor. Definitivamente el contacto parecía quemarlo, y pestañeó una vez, y la segunda, dejó sus párpados cerrados; no quería usar una psyché, esta vez, dejaría que el agua, el aire, y el mismo movimiento del chico pintara una imagen en su mente. Quería sentirlo, podía dibujar los contornos, borrosos en su imperfección, y podía adivinar que colores tendría....

Mas no le sorprendió la última frase de Hisoka. El tacto del chico era como la brisa marina en un día de calor: íntimo, entregado, crudo y refrescante. Delrösch estaba acostumbrado a insinuaciones de este tipo, o incluso cuando él a debido de ser el iniciador. Pero no eran como ahora, no eran estas manos, ni estas sensaciones,ni la delicadeza, ni esta que parecía ruda verdad.

Parecía que Hisoka era realmente especial en lo que hacía. Y sintió el tremendo deseo de dejarse ir, por una vez no negarse, ni hacerlo por deber, por el bien del objetivo. Pero...

"¿De qué color es su cabello,Hisoka-kun?" Subió su mano, la punta de sus dedos rozando con el cuerpo de Hisoka cual línea, pasando por su vientre, su torso, su cuello, hasta tocar el húmedo cabello. Suave. Corto, o hasta los hombros? Se preguntó, e inmediatamente sus dedos fueron en busca del cuello, tocando la raíz del cabello y delineando las hebras, hasta enredarlas entre el índice y dedo medio. Jaló ligeramente de las puntas, y el mojado cabello rápidamente escapó de su agarre."Y sus ojos?"

Los colores eran su debilidad. Sus psychés podían transmitirle olores, contornos, e incluso ciertas texturas, pero no color. Y su visión era completamente nula, constantemente blanca, o es constantemente en oscuridad? Pero la única verdad es que deseaba siempre poder identificar el mundo que rodea con sus manos, su propio cuerpo, delinear el mundo con sus dedos, olores y melodías.

"Ah." Suspiró suave, y sus dedos se escaparon a la oreja de Hisoka, siguiendo su contorno, hasta volcarse a la mejilla y deslizarse por los labios. Sentía la respiración del chico, calentando sus dedos, y abrió sus párpados hasta colocarse en frente de Hisoka, besándole en la comisura de sus labios delicadamente. Permaneció unos segundos, sintiendo el contorno que era Hisoka, la textura sobre sus labios, (y sobre su lengua?) grabándolos en su memoria. Se levantó del agua, y posó la mano que estaba en el rostro del otro sobre su muslo, sintiendo unas gotas de sangre escabullirse por ahi."Ah--", suspiró nuevamente, comentándole a la noche, algo que tiende a hacer en solitud."Con su permiso, Hisoka-kun"

Subió y pisó sobre las piedras, el sonido del agua cayendo de entre su cuerpo y pantalones que aún portaba, éstos pegándose a su cuerpo, semi-rotos por la pelea anterior. Continuó camino hacia la habitación, y antes de entrar, se quitó los pantalones con movimientos gráciles y cuidando de no pasar a llevar los cortes. Tranquilamente acomodó la toalla alrededor de sus caderas, unas cuantas mariposas bebiendo ahora agua más fría de su piel. En 20 pisadas más llegaría la cena al cuarto, y ya podía sentir el exquisito aroma a mariscos acercándose. 

Giró su cabeza hacia Hisoka antes de entrar, mirada perdida, cabello humedecido y mechones pegados al rostro. 

"No será por agradecimiento, Hisoka-kun." 

Dijo significativamente, y una psyché besó los labios de Delrösch, robando la humedad, sellando lo que parecía, como Hisoka, ser una promesa.
___________________________________
No tengo excusas ni perdon de GAIAAAA!! *shot shot shot seppuku*
Me encanto su post!! kfdvklvasl! POOOST!!BLABDLAno sabía como responder, mi musa se fue de vacaciones porque yo no tengo, la marrrrdita, y o shabía que ponerle asique le pido me disculpe por el post malo malo malo, y me ecantaría haberle dicho que si para que tuvieran hotmanlysmex, pero Deru Deru no es asíii asi OMGAWSH, please forgive me?
A mi amién me gustan como pareja!! dsladlsabdl pero por eso no será fácil uhuhu!! hagamoslo convivir y que tenga  situaciones incómodas y comprometedoras y luego mucho hotmanlysmex? o al revés? ahahah AHA er *shot*
Debo decir seriamente que me encanta la forma en la que escribes. Dibujas una imagen en mi mente de toda la situación de forma tan clara! Es como le sucede a Deru...ah! De verdad espero le guste!! Porque se que fui fail pero de verdad estoy cero inspiración :( estoy viendo Code Geass de nuevo para motivarme, ha ha*dies*
Me encanta que este de vuelta <3 <3!!

Respuesta  Mensaje 14 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 19/07/2012 00:37
"¿De qué color es su cabello, Hisoka-kun?"

Su piel se estremeció, haciendo vibrar su cuerpo mientras los ojos verdes observaban aquella mano viajar con calma, delineándolo.. hasta subir a su cuello. El cuerpo del rubio pareció relajarse de más, cómodamente. Cerró los ojos. El cuello era su debilidad. Le estremecía el solo hecho de sentirlo tocar un lugar tan sensible para él, como lo era su cuello. Entreabrió los ojos lentamente, para ladear apenas su cabeza y mirar de reojo aquella mano… cómo tocaba su cabello, buscando quizás notar que tan largo era, que textura tenía. Tembló. Tembló y relamió sus labios, sonrojándose al sentirlo nuevamente en su cuello. Cada roce le estremecía, sobre todo cuando apenas jaló y la boca de Hisoka se entreabrió dejando escapar un corto, pequeño suspiro inaudible "¿Y sus ojos?".

Dorado otoñal. Esmeraldas. Quiso responder esas preguntas. Incluso abrió un poco más su boca para responderlas. Pero el suave suspiro ajeno lo calló. La mano que recorrió de su oído hasta su boca, también lo calló. Sonrojándolo de sobre manera. Y él abrió sus párpados. Casi podía jurar que estaba viéndolo. Casi podía sentirse avergonzado de estarlo incitando. Pero entonces se acercó. Y los ojos impúdicos del rubio se cerraron, dejándose llevar por lo que vendría. Por la boca ajena que se arrimaba y le permitía sentir su aliento, exhalando en los labios de Delrösch con suavidad antes de cerrarlos y presionarlos sexualmente en un beso suave, no profundo, pero lo suficientemente húmedo para ser sensual. Dos, o tal vez tres dedos de su mano se posaron en la mejilla ajena, despegando apenas su boca, sin alejarse, para volver a besarlo de la misma manera. Probando su sabor, los labios del Delrösch eran fríos… estimulantes. Casi tan estremecedores como su misma presencia.

(...)

¿Escapó? Observó su cuerpo levantarse del agua. "Con su permiso, Hisoka-kun", los ojos verdes sorprendidos absolutamente de su acción. Su cuerpo repentinamente frio, sintiendo vergüenza de lo que había hecho. Sus manos rápidamente se dirigieron a su propia boca, entreabriendo sus labios para rozarlos y sonrojarse al sentir nuevamente la suavidad en los movimientos ajenos. ¿Por qué? Pensó para sí mismo, ¿Por qué… simplemente no me tomó? ¿Por qué no…? Si siempre era así. ¿Por qué ese hombre no había sido igual a los demás? Dirigió sus ojos por donde Delrösch se había encaminado, su mirada brillaba… tenuemente. Aunque sus ojos seguían confundidos. Su corazón estaba latiendo tan deprisa que no podía siquiera darse cuenta si acaso estaba despierto o dormido ahora mismo. Si aquella situación prácticamente improbable no era solo una fantasía de sus sueños imbéciles de encontrar algo parecido a un príncipe azul. No era eso… Delrösch sama no quería nada, no quería sexo, no quería una paga, no quería abandonarlo tampoco… cerró sus ojos, sonrojando sus mejillas, aún en el agua… con el torso algo seco y frio al igual que sus brazos. Cubrió más su boca con la mano que acariciaba sus labios, permitiéndose sonreír un poco… sonreír, porque era simplemente increíble. Esta vez no era un sueño. Estaba en un ¨hogar¨ acompañado por alguien que no esperaba absolutamente nada a cambio y le permitía un baño, una cena o dormir con calma y calor, casi gratuitamente. Temió un momento… bajar demasiado la guardia. Pues su cuerpo, a pesar de duros entrenamientos, siempre había resultado débil.

"No será por agradecimiento, Hisoka-kun." Al escuchar su voz giró rápidamente su rostro a él, notando su presencia recién en ese momento. Agitándose al ser descubierto tan pensativo y metido en su interior, pero se relajó al oírlo. Dejando escapar el aire de sus pulmones, exhalando mientras cómodamente sonreía. Que tonto fue al pensar como siempre… y ahora él decía eso. Realmente se sentía seducido. Su cuerpo salió de las termas, caminando aún desnudo y con la suavidad que lleva uno al caminar cuando se encuentra vestido… - no tengo palabras – habló habiéndose detenido justo delante de él aunque manteniendo una distancia prudente, agradeciéndose encarecidamente con sus modales y su bondad. Tomó una toalla, cubriéndose y otra para secarse con cautela… manteniendo apenas, apenas visiblemente la sonrisa en sus labios. Antes de terminar de secarse notó que su kimono, como un trapo mojado, se encontraba aún en el agua.

Caminó nuevamente a donde se había encontrado antes, recordando una vez más ese beso tan intenso a pesar de haber sido corto. Tomando la tela con sus manos y escurriendo de ella el agua. Pensativo… cuando terminó de sacar el agua de la tela ladeo su rostro con lentitud para observar nuevamente al shattentaicho. Con los labios en una línea recta esta vez, y observándolo con sutileza, murmuró - …rubio… - quizás desconcertando al mayor, su voz completamente natural dejándose llevar por el momento, continuó - …mi cabello es rubio, mis ojos… son verdes – e inclino apenas su cabeza como si se presentara con aquello que no era su nombre. Manteniendo sus ojos en él... nuevamente dejó ver que la comisura de sus labios se elevaba en señal de sonreír... un poco.
 
. . . . .
sjkahldksjd que Deru no sea así como Hisoka esperaba que lo fuera lo hace un hombre distinto y por lo tanto llama completamente su atención!! >w< No hay problema con el post! aunque fue corto pasaron muchas cosas ://3 Sabemos bien que no tenés vacaciones Tammy ;w; debe ser feo. Yo ahora mismo estoy con familia pero aprobecho que se fueron a pasear sin mi para escribir y responder algo. Usted no desespere, por mucho que tarde, yo la esperaré y responderé! >/3 quiero demostrarle que Delrösch se lleva toda la atención  de Hisokita~ :3 se esforzará! ahora que lo ¨rechazo¨ por llamarlo de alguna manera, podras experimentar al Hisoka tierno jakshaks jajaja es que, ahora se siente más ¨comodo¨ al notar que no era eso lo que buscaba ese hombre, entonces se dejará llevar~ un poquitito (L) u//u jashgakhshaks usted mi inspira a que yo escriba asi .//. aláguese usted misma ;w; la quiero~ y por supuesto que me gusta lo que leo de usted Tammy >.> yo tambien quiero volver a ver code geass! >D creo que lo haré en cuanto se vaya mi gente~! we! hehe º//º!

Respuesta  Mensaje 15 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 12/08/2012 23:13
Detuvo sus pasos al escuchar la voz del chico. Una suave imagen se estaba consolidando en su mente, entre los suaves toques de sus manos y psychés, y la amabilidad de Hisoka por llenar los espacios vacíos. 

¿Qué tono de verde? ¿Qué tono de rubio? Se preguntaba si los ojos de Hisoka brillarían bajo la luz de la luna, como Nichts solía describirle algunas miradas hacían. Delrösch cerró fuertemente sus párpados, tratando de controlar la hambruna que nacía en su pecho cada vez que sentía anhelar algo que jamás recuperaría.

Inclinó su cabeza ligeramente, aún dándole la espalda a Hisoka, y siguió dando pasos hacia una de las habitaciones, dispuesto a vestirse, y hacer desaparecer este vehemente deseo que, aún sin ojos que pudieran ver, no sabría si reflejarían su ferviente debilidad.

"Arigatou na, Hisoka-kun. En la habitación contigua han dejado ropas para ti, la cena llegará en unos minutos." Y desapareció tras la puerta, variadas psychés quedándose en el calor de la estancia principal.

--------

Se encontraba de pie frente a un espejo, estaba seguro.

Las psychés estaban descansando en la cama, armario y cabello, dejando que sólo sus dedos le informaran de la fría superficie frente a él. ¿Por qué? ¿Por qué permitía estas emociones inservibles resurgir? Este inalcanzable deseo de volver a ver los colores y el mundo a su alrededor. ¿Por qué era este chico el que le hacía querer algo que sabía jamás tendría?

Delrösch es una persona práctica. Ama lo que es bello, la disciplina, dedicación y honor. Es práctico, y el permitir estos deseos inútiles por tanto tiempo residir en su pecho era inadmisible. El espejo frente a él parecía burlarse, y de pronto, una añoranza y tristeza horribles le invadieron. Cerró sus párpados, y apoyó su frente y cabellos mojados en el frío espejo. Su cuerpo parecía acompasar tal temperatura, verdaderos latidos ardientes haciéndose presentes en sus muslos, y el kimono de corta hechura característico de él colgado a un lado.

Estaba seguro que Oichihime lo había escogido para él; ella siempre tenía aquella delicadeza, o más bien, travieso pasatiempo. Sin cambiar de posición frente al espejo, extendió una de sus manos a tocar la tela, mas la suavidad y exquisita textura no pudo calmar su ánimo como solía suceder. Su mano cayó de golpe a su lado.

Puede se verde puro, o verde esmeralda. Verde oscuro, como recuerda el de las algas del cardinal, o una combinación como la caparazón mezclada con gris o turquesa de las tortugas que anidaban en las orillas.

"No tiene importancia." Se murmuró mordazmente, rompiendo su labio inferior y dando un golpe al espejo que para él no servía. Soltó un suspiro casi inaudible cargado de penumbra, y sintió su cuerpo ser recorrido por escalofríos constantes. Tosió, su garganta quemándole fuertemente. El colmo sería un resfriado. Sus psychés sintiendo el estado emocionalmente inestable de Delrösch, se acercaron a él, revoloteando cálidas y protectoras por sus mejillas y desnudo cuerpo.

Es entonces que abrió sus párpados, y comenzó suavemente a cantar.

Separándose del espejo, las mariposas trajeron el kimono corto hacía él, mientras se deshacía de sus rotos pantalones con ligeros tirones de los puntos. Las psyché fijando el último nudo, se preguntaba de qué color sería la ropa. Sin dejar de cantar, realizó un suspiro interno, pensando en que ponía demasiada confianza en Oichihime, y el recuerdo de la extraña mujer y su habilidad para hacerlo sentir incómodo le arrancaron la última emoción negativa en su interior. El cantar siempre le ayudaba, y las psychés, felices danzando a su alrededor, parecían estar de acuerdo con él.

A solas con ellas, finalmente sonrió, dos psychés besando sus mejillas. 

Se sentó suavemente de rodillas en el cojín frente al espejo, testeando la movilidad de sus muslos descubiertos, y decidió que era mejor sentarse en la cama después de tomar el peine. Alcanzando con su mano la peineta de madera para cepillar su cabello y posicionar el adorno final, su dedos rozaron el material, que como agua entre sus dedos se escabulló. Frunció el ceño, y dejó de cantar, porqué sus psychés estaban siendo traviesas! Tres de ellas tomaron el peine y se escabulleron por la puerta corrediza que cinco otras habían abierto, hacia la salita principal.

Todos sus sentidos gritaban boicot mientras su corazón decía que esta era la manera que ellas tenían de subirle el ánimo.

Y Delrösch, aún con el cabello mojado y poco presentable, se las dejaría pasar. De verdad.

Hasta que vio que el peine en alas de colores entraba a la habitación de Hisoka, la puerta correspondiente en sus narices se cerraba, y una voz suave alertaba la llegada de la cena en la corrediza principal, seguida de las risillas de Tsuguruhime.

Suspiró, y fue a permitir la entrada de la cena.
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Espero que te gusteeee!! Lindoooorg yo tb te kero! Por favor recuerda que también puedes utilizar a Tsuguruhime, Motochika y Oichihime para hacer avanzar la historia *___*!  La verdad, me divertí mucho escribiendo este post. Creo que hace mucho no había logrado hacerme una con Deru, y con este post al fin pude sacar más de él a resplandecer y mostrarse; es gracias a usted Shou-tan! <3 Ya quiero que siga esta historia!

Respuesta  Mensaje 16 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 04/10/2012 20:00
¿Cena? ¿ropa?... de algún modo vio en esos pequeños detalles toda su más grande felicidad. Sonriendo mientras exhalaba el aire de sus pulmones a través de sus dientes y abandonaba esa tela cansada y fina colgándola en alguna parte para que secara deprisa y no tuviera que usar vestimentas ajenas por mucho tiempo. Ladeo su rostro mirando detrás de su espalda... él ya no estaba allí. Continuó secándose y se encaminó con tranquilidad a la habitación contigua, con tanta serenidad que parecía desconfiar de lo que le rodeada. Habituado a mirar cada tanto a su alrededor para saber si estaba a salvo.

Se sentó sobre la cama del lugar, acariciándose el cabello. Pensativo… disipado. ¿Qué estaba ocurriendo? Casi podía jurar que oía una canción contigua a él. Miró a su alrededor notando la ropa… los aromas, el calor… y ¿esa voz? ¿esa canción? (…) Su corazón tembló y Hisoka dio cuenta que podía oírlo latir tan intensamente que le interrumpía la agradable sensación que le daba esa voz.

No… no debía ser nada. Seguramente música que se filtraba de alguna parte.

Aún así le extrañaba, le dejaba desorientado mientras se vestía con lentitud. Mirando perplejo su cuerpo en el espejo, su rostro, sus cabellos… nunca antes había deseado tanto que lo miraran. Rozón con la punta de sus dedos ese cristal, recorriendo su propio cuerpo en el reflejo. Imaginando que esa mano… no le pertenecía, si no que era de… él. Haciendo el mismo recorrido que había hecho cuando permanecían aún en el calor de las termas. Exhaló. Nunca antes había deseado tanto que lo miraran.

Que lo mirara.

Al sentir el sonido de la puerta se sobresaltó un poco, observando a las psychés entrar trasportando algo. No pudo evitar cubrirse la boca y reír por lo bajo, una risa que rozaba la ternura con intensidad y es que resultaba gracioso y magnífico que entre todas se ayudaran a llevar un elemento tan grande para ellas, tan excedido de su peso. Eso era realmente una muestra de lo que significaba trabar en cooperación. Algo que Hisoka nunca había logrado ni deseado, incluso en su propio escuadrón prefería trabajar solo bajo las órdenes del capitán, que acompañado. Estiró suavemente su mano para no espantarlas mientras ellas cedían el peso de esa peineta, dejándola caer en su palma.

Apenas sintió el objeto en su mano la canción volvió a su cabeza, la voz que cantaba y la boca que lo hacía. Tan fina y fría. Lo recordaba como si lo hubiera visto antes, como si hubiera estado presente mientras esos labios entonaban esa hermosa canción. Pero tan rápido como apareció esa imagen, desapareció. Y el rubio ojiverde quedó observando esa peineta, perplejo… ¿Qué se quería decir a sí mismo? Ah… desde que se había alejado de ese hombre toda su cabeza se había transformado en una maraña de pensamientos. Las psychés, lejos de saber en qué estaba pensando, se posaron en sus propios cabellos y  el rubio no lo pensó dos veces antes de levantarse de esa cama y caminar a la puerta, abriéndola espaciosamente pero de forma lenta. Observando quien estaba afuera. Quería saber… quería saber tantas cosas. Si era Delrösch quien cantaba, si la peineta le pertenecía a él o a quién, si la comida estaba lista… si podía volver a rozarlo de algún modo…

Sus ojos se entrecerraron ante ese pensamiento, porque por más mínima que fuera la caricia, incomprensiblemente, necesitaba volver a sentir de su piel.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
NO tengo perdón de Dios ;w; lo sé, ya lo sé. Y no es como si me haya dejado de gustar ME o Deru o rolear~ es solo que la vida se tornó para otra dirección ya sabes, no tengo excusas, simplemente te abandoné ;___; y se lo que se siente por eso la culpa me carcomía pero no me podía concentrar! oh shit linda Tammy, espero que no estes muy enfadada conmigo! me eh dedicado más al dibujo, tendré que recompensar a todo ME de algún modo~ ;W; *llanto*

Respuesta  Mensaje 17 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 07/10/2012 23:36
La contracción alrededor de sus ojos hizo su ciega mirada penetrante hacia la chica que traía la cena, quien cesó su risilla de forma inmediata.

Delrösch no gustaba de ser burlado, ni mucho menos se sentía cómodo estar poco presentable. Hoy había claramente excedido su límite, tanto de paciencia, como de energía. Suspiró, y se arrodilló en donde recordaba se encontraba siempre un almohadón junto a la mesa, por el lado derecho, el que observaba hacia las habitaciones y le permitía oir directamente sonidos en la ventana o tras la puerta. Corrió sus dedos por su mojado cabello, tratando de ordenarlo.

Tsuguruhime dejó la cena sobre la mesa, y se arrodilló fuera de las puertas para cerrarlas tras una  reverencia. Le dirigió una sonrisa a Hisoka cuando este salía de la habitación, cargada de animo y travesura. La puerta se cerró, y el delicioso aroma de la cena quedó secundario para Delrösch cuando el chico se quedó parado fuera de su puerta, en la sala.

Su respiración cesó cuando sintió que las psychés formaban una corona en el cabello de Hisoka, y le transmitían su calor y humedad. 

Su corazón saltó un latido al pensar que jamás sería capaz de mirar a Hisoka. El pensamiento le hizo cerrar sus párpados, y apretar sus manos sobre sus muslos en fuertes puños.

"Hisoka"

Susurró, y recordó que a temprana edad había descubierto que mirar no es lo mismo que ver; que cada vez que alguien reía a sus espaldas se atragantaba en lastima y envidia; que cada vez que alguien juzgaba lo hacía sin saber; que pronto la gente olvida que no todos leen mentes, y las palabras son insuficientes y erróneas para decir lo que en verdad se siente. 

Esos eran sus pensamientos de consolación, desde que dejó de ver. Porque el saber y sentir tienen un océano de distancia, entre mares tormentosos y navíos perdidos.

Tragó saliva. Y con un gesto de su mano indicó a Hisoka que tomara asiento -- y sus dedos se cerraron, en una especie de espasmo, de inseguridad, de indecisión. Sus psychés se alejaron completamente de Hisoka para sobrevolar la habitación y caer en distintos lugares --las puertas, la terraza, la mesa, pero no sobre su cabello, no esta vez, no cuando estaba ahora entre húmedo, seco y enredado--, dejando un aroma en su camino que llenaba el silencio de la habitación.

Delrösch se sentía avergonzado de no encontrarse en mejores ropas para su invitado. No había sido acostumbrado si no a estar siempre presentable, siempre amable a la vista, y aunque sabía que Hisoka lo había visto en sus ya dos peores momentos de la semana, una pequeña parte de él se decepcionaba de estar así, indeseable, frente a alguien que le causaba una extraña sensación.

"Cepillarías mi cabello?" 

Y sus labios se sellaron tan rápido como escapó la última letra, sus párpados abriéndose en sorpresa ante sus palabras. Había hablado sin pensar, y sintió como un leve sonrojo intentó apoderarse de su rostro. Sin levantar su cabeza mantuvo la vergüenza a raya, y agregó un suave por favor a su petición.

Lo hecho, hecho está, y si eso ponía a Hisoka a su lado en este minuto, permitiría solo por esta vez que la cena se enfríe.
___________________________________
Dont' be a dolt! Como crees que me voy a enojar por algo así? Yo te esperó hoy y siempre, y me pone re contenta cada vez que escribes con Hisoka! Me encanta leer tus posts, y si hay algo que tengo, es paciencia. Además, tu siemrpe la has tenido conmigo, por favor cree que la tedré contigo, si? Eso no quita que me gustaría respondiéramos ambos más pronto! Ha ha, ya tengo algo semi planeado, para hacer que esto se vuelva un poco más emocionante, y si me permitirías traer a un personaje mio de invitado mas adelante, me ayudarías mucho...claro está, si aun quiere que Hisoka y Deru = 1313 LOL.
Y loco, te keru y tu puedes, ánimo! Que la mal tiempo le ponemos buena cara porque no hay nada que le enfade más, muahhaha! Todo pasa por algo, y lo más importante es que seas tu mismo, y al final logres sonreir de verdad. Recuerdalo. Los que estamos aquí para ti nos importa que seas feliz.
PS: Todo esto OBVIO fue después de recuperarme de mi poderoso SQUEAL por la ropa de Hisoka, que me lo imaginé ahí todo rubio y con su pecho abierto, y acostado y Deru sobre él y dvasldvslvdladbvl *nosebleed*

Respuesta  Mensaje 18 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 08/10/2012 19:50
Al principio al ver a la mujer se sonrojó de forma automática, no esperaba encontrar a nadie más que al hombre con quien compartía el momento, pero supo sonreír casi de forma tímida, haciendo una reverencia con la cabeza antes de que ella se fuera. De alguna manera, la sonrisa de la muchacha había resultado diferente a lo que presentía era la normalidad. Pero sus ojos dieron con Delrösch, separando apenas los labios al notar las telas que adornaban su cuerpo, podía jurar que casi parecía un muñeco, pues era demasiado perfecto y tantos adornos… Estaba seguro que en ese momento, a sus ojos, él no parecía humano.

Reaccionó de la ensoñación en la que estaba cuando escuchó su nombre – si… - se oyó su suave voz, prefiriendo oírse sensual que descortés, respondió lo mas enseguida que pudo, queriéndole demostrar que tenía toda su atención puesta en él. Al ver el movimiento en su mano, sintió la necesidad de volver a acariciarse con ella el rostro. Pero no lo iba a hacer, era suficiente acoso por esa primera vez. Supo entonces que lo mejor sería arrimarse y cuidadosamente tomar asiento – con su permiso – murmuró, sin interrumpir.

Quedó mudo ante la invitación a cepillar sus hebras… incluso tomando color en sus mejillas y sonriendo apenas por ese momento silencioso que había quedado entre los dos de repente, notando con sus ojos puestos en él, que seguramente se sentían igual los dos - …me encantaría… – casi lo murmuró, como si realmente lo deseara. Arrimándose con cautela… después de todo era Hisoka quien tenía la peineta en sus manos y ahora podía saber a quién, sin lugar a dudas, le pertenecía. Con una de sus manos, suavemente alzó ese cabello que se deslizaba entre sus dedos… comportándose mal, pues lo llevó a su propio rostro cuidando de no tirar de él, arrimándoselo hasta poder sentir ese aroma suyo tan característico e intenso.

Era un chico malo, era un chico de las calles que alguna vez había sido un príncipe. Por lo que estaba mal acostumbrado a obtenerlo todo, y disfrutarlo de forma grotesca y elegante a su vez. Para esconder su atrevimiento deslizó la peineta justamente por ese mechón… siento suave, acariciando su cabello en el trayecto, rozando con su mano la nuca… sin querer… Desvió los ojos embelesados que miraban el cabello peinado caer cada tanto, en silencio… para mirar la comida sobre esa mesa. Sonriendo, apenas curvando los labios, al imaginarse tanteando esa comida. Al distraerse, deslizó sus finos dedos en el oído ajeno, acariciándolo, también sin querer.... no?... . Al darse cuenta se arrimó, para susurrarle en el mismo lugar, con cautela – lo siento… - debía dejar de ser tan provocador. Lo sabía, Pero de algún modo… simplemente no quería portarse bien. No esta vez. Aún así y bajo esos pensamientos, al son de sus dedos deslizándose en esas hebras castañas, habló - …tienes… - entrecerró sus ojos con lentitud - …el cabello… más hermoso de los que tuve el gusto de tocar… - y eso que había tocado muchos, pero no, ese cabello era casi femenino. Delicado, fino, largo. No podía evitar preguntarse en su cabeza ¿Cómo se sentiría tener ese cabello deslizándose por su propia piel? La piel de su vientre, de su pecho, o su espalda. Donde fuese… sonrió un poco al terminar de peinarlo, quizás le hiciera cosquillas.
 
. . . . .
 
Hablando de responder más pronto jaja, es que me llama la atención la idea que tenés, ¿como crees que yo no voy a querer que estos dos..... se quieran? noo~~  como crees no me molesta que traigas personas ni nada de eso, todo lo contrario!!! asi es mas divertido aún!!, Hisokita esta lleno de amor por dentro y quiere compartirlo con ese hombre u//u (en otras palabras: OH YES. YES.) LOL gracias por los animos nena, yo también te quiero~ :3 poderoso SQUEAL XDDDD Tammy andaba leyendo el post cuando derepente un salvaje Hisoka con kimono abierto aparece jaja Yo no puedo creer la imaginación que tenés, lo que me hiciste pensar jshlakjs por la shit que imaginación tan hot jajaja c/x

Respuesta  Mensaje 19 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 09/10/2012 23:57
Tomó aire profundo, de forma lenta como su fuese su último suspiro; el aroma de Hisoka de sabor intoxicante, a sándalo quemado en jazmín, y un recuerdo evocó las sensaciones de Delrösch, de noches sin luna bañado en aceites naturales e inciensos que humeaban exquisitos a lo largo de la oscura noche.

Con una inspiración rápida volvió su concentración, sintiendo los dedos de Hisoka pasar por su delgado cabello, la peineta deslizarse con una suavidad y gracia que no le sorprendían en tal chico.

Sabía mucho de Hisoka RD, pero no sabía de Hisoka -- el chico poseía una timidez mezclada con impulsividad e inseguridad inusitada, como una lantana que no sabe de qué color desea brillar. Pero eso no le parecía inconsistente, por el contrario: le agradaba lo genuino que parecía ser.

Y cerró sus parpados suavemente, relajando más su postura de forma voluntaria, más casual, más cercana, más aceptable hacia Hisoka. 

Asintió suavemente, sin querer alejar su cabello del peine, sin querer dar fin a la excusa para mantener al muchacho cerca. Esos comentarios le eran bastante conocidos, noche tras noche, baile tras baile, que hermoso cabello, que aroma, eres exquisito -- de muchos había escuchado, pero a pocos había permitido tocar, y asimismo, a pocos había aceptado tales halagos.

Muchos habían sido sinceros, y muy pocas de las intenciones tras ellos habían sido inocentes.

Un escalofrío recorrió su cuero cabelludo, un cosquilleo suave y extraño, más no ingrato, recorriendo cada una de sus vértebras hasta su espalda baja. La sensación se repetía cada vez que el peine o las manos de Hisoka pasaban por el tercio medio y bajo de la cabeza de Delrösch, hasta que no pudo evitar ladear su cabeza, como si quisiera escapar y jamás alejarse del gesto a la misma vez.

Su mano se apróximo de forma rápida hacia la muñeca de Hisoka, sus dedos apretando con suavidad la piel bajo sus yemas. Giró su cuerpo para estar de frente al chico, sacando con su otra mano la peineta, dejándola sobre su falda. La mano en la muñeca, sobre la cálida piel desenvuelta en seda, se desliza con un solo dedos ahora enc ontacto con el cuerpo del chico, pasando por las coyunturas de sus huesos y músculos, rodeando la parte central de la muñeca, como si siguiera un línea imaginaria, dejando tras su recorrido un único adorno de una lantana blanca con tonalidades azules y adornos verde limón. Pero olí a jazmín mezclado con aroma natural de la flor.

Bajó sus manos, bajando de la palma de Hisoka, bordeando el calor que desprendía el chico cercano a su torso, su muslo, pero sin rozarlo, sin tocar su ropa, tan cerca y tan lejos, solo un par de aromas mezclándose, y Delrösch estaba ahogado en el aroma de la habitación, tan profundo y excitante que sentía la temperatura de su cuerpo elevarse. No era olor a comida, si no que esta se mezclaba haciendo más poderoso el simple aroma a excitación.

Tragó saliva, y giró su cabeza, indicando a Hisoka que pusiera el adorno en uno de sus largos mechones.
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Plan? PLAN? Mi plan es el FOREPLAY más LARGO de mi vida ahhaha! Al menos esa es la fase 1. Muahahah. Please bar with me luv?

Respuesta  Mensaje 20 de 22 en el tema 
De: Shounen Kait Enviado: 07/01/2013 18:41
Sus instintos se alarmaron al verse sostenido de la muñeca en tan ágil y entrenado movimiento.

Lo había visto...

Los ojos de Hisoka eran rápidos, pero no había podido escapar. Su mano quedó tirante, en el aire, sostenida y tensa.

Observó los ojos de quién tenía ahora frente a él, con los instintos a flor de piel y el cuerpo en alarma. Delrösch apartó esa peineta de su mano con una tranquilidad asesina.... El rubio solo podía observar en silencio, apenas conteniendo la respiración. Entonces ese agarre se transformó.. en una caricia que relajó los párpados del RD con calma, pero no borró la alarma en su interior hasta que comenzó a sentir ese aroma... a flor.... observando en su mano ese adorno y después la mano ajena.

El calor ajeno.

Se estremeció, sin poder evitarlo.. sin poder ocultarlo a tiempo. Su cabello tembló apenas y sus ojos se cerraron por una milésima de segundo.... tragando saliva suavemente y llevando las orbes verdes a observar esa señal.

En su cabello, ese bello adorno.. ponerlo en su cabello.

Así de lenta fue la orden en su cabeza. No supo qué hacer, sobre todo qué decir... había experimentado algo extraño y que francamente no se lo esperaba. Selló sus labios en una línea recta, aunque calma y tomó entre sus manos el adorno, dedicándose suavemente a acomodarlo donde debía. Volvió a mirar su propia muñeca al terminar, se sentía... anonadado. Llevaba tiempo de su vida entrenando y no pudo evitar ese agarre, sabía que aún así era mas débil que los demás, pero en este caso.. la distracción principal... fue esa irrefutable atracción momentánea a pegarse a él.. como un imán.

Y sin querer, por el pensamiento de verse débil ante él... permitió reinar el silencio sin darse cuenta.

. . . . . .
Me había trabado y no sabia que responder D'x intenté participar en el beso carmín, aún lo estoy intentando! -despuesvaairaresponderconarmand- 

Respuesta  Mensaje 21 de 22 en el tema 
De: Lyricalia Enviado: 09/01/2013 05:32
Quizá...quizá se había apresurado. Quizá estaba leyendo al muchacho mal, pero, ¿cómo podría? Los avances habían sido claros en el agua.

El silencio ruidoso le puso extrañamente nervioso, el adorno horriblemente pesado en su cabello.

O es que el hecho de haberle mencionado a Hisoka que él estaba interesado en una relación que fuera más que una sola noche lo había distanciado? Era eso? Las psyches se empezaron abrumar ante el estado emocionalmente extraño de Delrösch, unas cuantas alejandose de él, una revoloteando por el rostro de Hisoka hacia el patio, otra posándose en el dorso de la mano sobre el regazo del feuermaske.

El chico le interesaba. Pero quizá el rubio buscaba algo más situado con su...ocupación?

Delrösch gritó por dentro. De verdad. Hace mucho que no sentía los enormes deseos de olvidar todo lo que su enseñanza era, de olvidarse por un solo minuto de las consecuencias y tomar lo que quería--

"Hisoka."

-- pero sabía que si hacía eso, no podría vivir consigo mismo, y mucho menos dirigirle la palabra al muchacho a su lado.

"Hisoka..." Repitió de forma más suave, como si al romper el silencio fuese a quebrarlo a él.  Movió su mano izquerda, grácilmente posandola sobre el dorso de la mano de Hisoka, la mariposa volando para evitar ser aplastada y posicionarse sobre la mano fría de Delrösch. La apretó entre sus dedos, y luego giró su cabeza hacia el rubio, sus ojos mirando hacia la nada, y abrió su boca, pero nada pareció salir.

Lo intentó una segunda vez y, avergonzado ante su ineptitud, cerró sus labios, retiró rápidamente el contacto, su rostro y comenzó a ponerse en en pie con delicadeza.

Es entonces que entró abriendo en seco la puerta corrediza la ama del lugar, y las psychés de Delrösch aterrorizadas abruptamente escaparon al jardín sin posarse en nada, revoloteando, sobrevolando, alejándose y acercándose, la velocidad de su escapada arrebatándole información sensorial al shattenmaske, quien ante la sorpresa soltó un ahogado sonido, abortando el ponerse de pie, y puso las palmas de sus manos en su rostro, su cabello ondeando brusco ante la moción, su respiración agitándose y su corazón latiendo dos mil por hora.

"Delrösch! Delr-- Oh!" Proclama Oichi, su postura molesta esfumándose al ver al ninja claramente acongojado. "Oh, mi pobre Delrösch." Cerro silenciosamente la puerta, su rostro la viva muestra de compasión y misericordia. Se acerca a él, y se arrodilla a su lado sin poner cojín alguno, recogiendo sus ropas alrededor de sus piernas, arreglando su cabello y acercando la palma de su mano cerca del muslo descubierto de Delrösch, permitiendo que el calor de su cuerpo le advierta de la intención de tocarle. Es solo cuando el peligris toma un profundo respiro y retira las manos de sus rostro, que Oichi toca el muslo y sobre la mano de ella se posa la de Delrösch, buscando un cable a tierra, una sensación más que le permita suplir lo que le fue negado.

"Qué te tiene tan distraído?" Le menciona cálida, y luego dirige su atención a Hisoka, su mirada penetrante, y una sonrisa se forma firme en sus labios. "Ah, por él es que no me has sentido. Tsk tsk, Deru Deru, y si hubiese sido un enemigo?"

Delrösch, pálido pero de otra forma aparentemente recuperado, como si nada hubiese sucedido, mantuvo su rostro fijo ante la pared de enfrente.

"Oichi-sama, sabe que ella sólo responden así ante usted. No hay estímulo que en ellas provoque alejarse de mi más que usted."

Fue dicho de forma suave, no acusadora, como si el argumento fuese ocupado por millonésima vez, más sin signos de impaciencia.

"Hmmm, que hiriente Deru. No son palabras que debe salir de tus labios, menos hacia una mujer como yo. Pero por la compañía que posees esta noche, lo dejaré pasar."  Pone su otra mano sobre la de Deru, para luego levantarla y acariciar su mejilla. Planta un beso, luego toma ambas manos del ninja y las posa sobre el rostro de ella, invitándole a reconocerle como desde pequeños era ritual.

Si era posible, el relajo ante la invitación fue visible. Al terminar, sus manos se posaron en la mesa, buscado un objeto inanimado para aferrarse, sus dedos constantemente acariciando la superficie.

"Me temo Deru no nos ha presentado, olvidando sus modales ante estas rebeldes mariposas. Hermosas, pero aterrorizables." Tras dedicarle al jardín una mirada amenazadora, le sonrió al rubio de forma cálida, su cabello recogido y lleno de adornos, elegantes como su violeta y rosa kimono. Puso sus manos frente a sus dobladas rodillas, su posición seiza de forma perfecta, sus dedos juntos y las yemas de los dedos casi besando el sueño, y se agachó despacio, cerró sus ojos, ofreciéndole una reverencia y una bienvenida.

"Mi nombre es Oichihime, Hisoka Rusell Deliverance, bienvenido seas al Tsukihime."

Y la mujer, sin levantarse de su posición ni levantar la cabea, le miró predadoramente, y esbozó una sonrisa afectada.
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Tomalo con calma mi Shou! Te entiendo ene, a veces la inspiración es como un resfriado: viene por estaciones, te agarra fuerte, y después se va dejando haaaartos pañuelitos mocosos (?) ok no. OTL. Gracias por responder!! Y si puede...te apsas por la shattenmision oo.alfa? Que tenemos un nuevo roleadooorrrsss *___*!! siii?
Y me quedó largo porque me inspiré y quería seguir, y me dije "dale la oportunidad a Sho de contestar!!!" Pero es que se me ocurrió algo, pero quiero que contestes pero que también lleves la trama y y y y OOORRRRZZZ. *shot*

Respuesta  Mensaje 22 de 22 en el tema 
De: MaryChain Enviado: 19/03/2013 03:21
Up!
Rol en espera.
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