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pensadores: U.G.Krishnamurti: Una vida...1. El Encuentro
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De: x-x-loly_ta-x-x  (Mensaje original) Enviado: 26/10/2003 21:52

U.G.Krishnamurti: Una vida

Biografía, por Mahesh Bhatt


1. El Encuentro

Traducido por Enver Balcázar


"Si usted está buscando a alguien que le dará
la iluminación ha venido a donde
el hombre equivocado."

--U.G.

Agosto 27 de 1991.

Tengo programado mi vuelo de Bombay a Londres. Alejarse del hogar y de tus seres queridos así sea por un corto tiempo es duro. Me pregunto cómo U.G. le ha dado la espalda a toda experiencia.

Voy a estar durante 40 días con U.G. en Londres. Después de esto viajaré con él a California para escribir su biografía. Cuando el avión despega me invade un sentimiento de sequedad. "¿Podré hacer justicia a esta tarea voluntaria de presentarle U.G. al mundo?

La leyenda de Icaro en la mitología griega aparece en una página de revista New Writing. La leyenda: Dédalo secretamente hizo dos pares de alas, un par para sí mismo y otro para su hijo Ícaro. Las alas fueron confeccionadas cuidadosamente con plumas y cera de abejas. El padre enseñó a su hijo como usarlas y le advirtió que no volara muy alto porque el calor del sol podría derretir la cera. Luego lo llevó a la torre mas alta, y batiendo sus alas, ambos volaron como pájaros. Nadie pudo detener su vuelo. El joven y tonto Ícaro no pudo resistir la tentación de elevarse aun más en el cielo. El mundo entero parecía rendido ante sus pies. Voló muy cerca del Sol y la cera comenzó a derretirse. Las plumas se desprendieron, cayeron en pedazos e Ícaro cayó al mar y se ahogo,.

Se dice que no se puede mirar fijamente a la muerte o al sol por mucho tiempo sin pestañear. Mirar la vida desoladora de U.G. no es diferente. Quizás la única manera de escribir esta biografía es dándome permiso para fallar. No hay que dejarse intimidar por complacer los estándares más altos, ni siquiera los propios.

No es siempre posible divagar hacia atrás a través de la niebla de los años y recordar el momento exacto en que usted conoció a alguien. ¿Cuando conocí a U.G.? ¿Dónde y cómo? Mirar nuestro pasado es como mirar por el lado equivocado del telescopio. Todo se ve distante y pequeño. Cuando el avión se hundió en un mar de nubes, floté a través del tiempo, perdiéndome en una bruma de imágenes...

Eran días de vida peligrosa, leyendo a Jonathan Livington-Seagull, oyendo a John Lennon y tomando LSD. Esa mañana estaba meditando cuando sonó el teléfono, mientras me dirigía a contestar ni imaginaba que esa llamada cambiaría toda mi vida.

"U.G. esta aquí... ¿cuando quieres conocerle?" preguntó Pratap Karvat. "Ahora mismo", dije yo. "Anota mi dirección... " Había conocido a Pratap Karvat, intelectual suave y manso, por casualidad en el rodaje de una película. Yo vestía con mantos naranja (en ese tiempo), leía el último libro de J. Krishnamurti, "El despertar de la inteligencia", y Pratap se me acercó queriendo hojear el libro. Es un lector voraz, un adicto a los libros. Me habló sobre J. Krishnamurti, Rajneesh y sobre el juego espiritual. Luego, así como así, mencionó el nombre de otro Krishnamurti, llamado U.G. Krishnamurti, que visitaba la India cada año, pero que permanecía anónimo. "¿Quieres conocer a este U.G.?", preguntó. Sentí curiosidad. "Porqué no, mientras más mejor. Vamos a ver que tiene él para decir".

El olor a tabaco, el clamor de la ciudad y la oscuridad, la escalera chirriante. ¡Qué vívidos los recuerdos de mi primer encuentro con U.G.! Su rostro lentamente eclipsó todo dentro de mí. Un silencio volcánico me atravesó. ¡Cómo podría olvidar lo que dijo aquel día!

Yo no soy un hombre de Dios. Más bien me llamaría un fraude. La búsqueda de Dios se ha vuelto un factor tan obsesivo en las vidas de los seres humanos, a causa de la imposibilidad de obtener placer sin dolor. Ese adefesio llamado la mente ha creado muchas cosas destructivas. Por mucho la más destructiva de todas es Dios. Dios se ha convertido en el sumo placer. Las variaciones de Dios - auto realización, moksa, liberación, los métodos de transformación de moda, la primera y última libertad y todas las libertades que van en medio - son las que están llevando al hombre a un estado maníaco depresivo. En algún lugar de la línea evolutiva, el hombre experimentó una auto conciencia por primera vez en contradicción a la forma en que en la conciencia funciona en las demás especies. Fue allí en esa división de la conciencia, que nació Dios, junto con la doctrina nuclear que está amenazando con extinguir todo lo que la naturaleza ha creado con tanto cuidado.

Ningún poder en este mundo, ningún Dios ni Avatar, pueden detener esto. El hombre está condenado. No tiene libertad de acción. Todo lo que podemos hacer es esperar el fin del mundo - incluso mientras hablamos de las formas para detener el holocausto nuclear. Esto puede sonar como Jeremías o una sentencia de un profeta apocalíptico.

U.G. era como un toro bramante, su furia me aturdía. Esto era extrañamente atractivo.

"¿No está usted señor llevándose toda nuestra esperanza?" pregunté. U.G. sonrió y dijo: "¿Lo estoy haciendo? Yo no soy ningún alegre optimista. Tú puedes vivir en esperanza y morir en la esperanza." "¿Tiene alguna actitud especial hacia la sexualidad?", pregunté. U.G. contestó:

Dios y el sexo vienen de la misma fuente. Dios es el placer último. Dios se tiene que ir antes que lo haga el sexo. ¿Por qué debe irse el sexo? Déjenme mencionar en pasant que todo lo que pienso acerca del sexo lo he aprendido de los hombres santos. Ahora sostengo que la vida de austeridad ascética, la negación del sexo y todas las disciplinas asociadas con la vida religiosa no tuvieron nada que ver con lo que me ha sucedido. Esto no quiere decir que la indulgencia en el sexo o la vida promiscua sean el trampolín hacia la iluminación o como la quieran llamar. Ustedes han sido alimentados con esa basura y no estoy aquí para desilusionarlos. Se pueden auto engañar pensando que fumar marihuana o que predicar la libertad sexual son el camino seguro hacia la "individualidad" o el "Samadhi". El hecho de que usted esté violando órdenes morales y códigos legales de conducta es una cuestión entre usted y su sociedad. Las actitudes sociales pueden estar cambiando pero todavía se considera que sus acciones son antisociales. Su guru le da la licencia y lo cubre para que usted no se sienta culpable o inmoral o impuro. Es como esas actrices principiantes ambiciosas que tienen sexo con el que llaman en Hollywood el casting coach o el productor-director para conseguir una parte en su película, también ellas se sienten superiores a las prostitutas profesionales. Ellas se excusan en que pertenecen a una profesión glamorosa. Yo no tengo posiciones morales. ¿Usted es feliz? ¿Quién entre ustedes es feliz? ¿Usted? ¿Su novia? ¿Su esposa? ¿O el novio de ella? Todos son infelices. No olviden que sus acciones afectan a todos. Son todos miserables.

Sentía que me quemaba por dentro. Accidentalmente había tocado un alambre cargado. Había caminado en un campo minado. Sus palabras me empujaron fuera del coma espiritual en que me había hundido, estaba desesperado. Necesitaba urgentemente un "viaje". Fue el LSD el que me había iniciado en el mundo de la meditación. Nos había dado a mi y a una generación entera de los 'niños de las flores" el gusto de lo místico. El deseo de revivir esta experiencia químicamente inducida me llevó por la senda del bazar espiritual.

Esa noche cuando apague las luces de mi cuarto y me senté a meditar, la imagen de U.G. se dibujó en la oscuridad. Sus palabras resonaban en mi cabeza. "La meditación es guerra", dijo U.G. cuando iba saliendo de su casa. Por primera vez en dos años, desde que conocí a Rajneesh, sentí pánico y no pude meditar. Vague por las calles. Los perros callejeros que me ladraban al verme pronto descubrían que yo era uno de ellos. Me detuve junto a un fuego con unos desconocidos. La noche era fría. Las chispas brillaban en nuestros ojos. Todos a mi alrededor estaban borrachos. El fuego nos sostuvo y nos confortó. "¿Es usted Mahesh Bhatt?" preguntó uno de ellos. "Si", contesté yo. Todos sonrieron. Estaban contentos de tenerme en medio de ellos. Me pregunto por qué. ¿Por qué yo no estoy contento de estar conmigo mismo? Todos los rostros alrededor del fuego se veían demacrados. Mas tarde, traté de dormir, pero no pude, algo me decía "amigo, pronto estarás en problemas".

"Me siento perdido, sólo. Estoy temeroso y lleno de dudas. ¡Ayúdame!" fue lo que dije cuando me encontré con el Bhagwan Sheree Rajneesh en su Ashram una tarde de invierno en Pune. El me miró fijamente, pasó suavemente su mano por mi cabeza y dijo: "Jesús también tuvo esas dudas cuando fue crucificado. 'Oh Dios, ¿por qué me has desamparado?' gritó, dudando que Dios estuviera con él. Pero tan pronto profirió estas palabras, se dió cuenta por sí mismo que Dios estaba a su lado, ¡yo estoy contigo!" Esa tarde me regaló su túnica blanca. "Lleva esto Mahesh, todo estará bien. Lo estas haciendo bien" Sus palabras me tranquilizaron. Me dijo las cosas que yo quería oír. Desafortunadamente este sentimiento de bienestar duró poco. Tenía que volver una y otra vez a las puertas del Ashram rogando por un nuevo encuentro con el Bhagwan. Era como un drogadicto, buscando desesperadamente su nueva dosis. Rajneesh se había convertido en mi muleta.



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De: x-x-loly_ta-x-x Enviado: 26/10/2003 21:54

Esto era una paradoja. Mi búsqueda de libertad se había transformado en una trampa, una prisión desde la que yo balbuceaba conceptos de libertad e independencia. Mi encuentro con U.G. me había dejado traumatizado. Muy dentro de mí se había enconado una herida. Puedes correr pero no puedes esconderte, puedes mentirle al mundo entero pero no puedes mentirte a ti mismo. Yo sabía que mis días con Rajneesh estaban contados. Los muros del paraíso empezaban a desmoronarse. Mi Bhagwan moría dentro de mí y no había nada que yo pudiera hacer.

Era inevitable, me dije mientras miraba lo que quedaba de mi mala (la cual me había dado Rajneesh) cuando desaparecía por el inodoro. Me sentí extraño al verme libre de ese collar de perro que me había tenido amarrado durante casi tres años. Estaba cansado de la vida que había llevado. Estaba cansado del hombre que yo era. Los años que pasé en el Ashram de Rajneesh no habían contribuido en nada para que yo mejorara. Un progreso en esa área era probablemente sólo una ilusión. "Si los libros y las charlas pudieran cambiar a la gente, este mundo sería un paraíso" dice U.G. Había terminado un capítulo en mi vida.

"El Bhagwan está muy enojado contigo Mahesh. Estoy rodando una película en los estudios Filmstan. Ven ahora mismo, tengo que darte un mensaje", dijo Vinod Khanna, la estrella de cine, unos días después de mi rompimiento con Rajneesh. Las noticias de que yo había tirado el mala por el excusado habían llegado al Ashram. Yo estaba listo para las repercusiones. "¿Por qué, Mahesh, por qué has hecho eso?", pregunto Vinod. Su preocupación era sincera. "Nunca había visto al Bhagwan tan enfadado. Quiere que vayas al Ashram y le devuelvas el mala personalmente. Es una oportunidad para ti. Dijo que ha trabajado muy duro en ti. Si no lo haces, dijo que te destruiría, Mahesh". Vinod me miró como si mis días en este mundo estuvieran contados. Había un silencio sepulcral en el cuarto de maquillaje. Me había rebelado contra de 'Dios', y su ira estaba ahora en contra mía.

Estaba enfadado. Recuerdo como Rajneesh me había dado discursos sobre el amor incondicional y me había hablado muchas veces de como era de detestable que las personas fueran posesivas. Era repugnante verlo ahora comportarse como un amante engañado, incapaz de soportar un rechazo. El era sólo un charlatán revendiendo verdades a medias, frases resonantes y conceptos sagrados. Y eso era lo que la gente quería, no las crudas realidades. En ese momento las palabras de U.G. vinieron a mi rescate: "Un guru es aquel que te dice que tires tus muletas, él te diría que camines y si caes te diría que te levantes y vuelvas a intentarlo". Estas palabras me llenaron de un inimaginable coraje ¿Quién le tiene miedo al Bhagwan Shree Rajneesh? "Levántate" me dije a mí mismo, "levántate sobre tus dos piernas, no importa cuán temblorosas estén, y camina." Una vez que lo hice no hubo marcha atrás.

De 1977 a 1979. Durante esos años me encontré con U.G. cada vez que pasó por Bombay. En esos días, U.G., Lallubhai Shah y yo, salíamos a caminar casi todas las mañanas. "Deberías escribir la biografía de U.G. algún día", me dijo Lallubhai Shah una mañana de bruma. (Lallubhai era un próspero mercader de diamantes que había dejado su próspero negocio para unirse a Vinova Bhave en el movimiento Sarvodaya. También había trabajado al lado de Mahatma Gandhi durante el movimiento de resistencia indio en contra del Raj británico). En ese tiempo yo era un director desconocido que hacía films publicitarios para sobrevivir. Mi vida personal era un lío total, por decir lo menos. Era un hombre casado y tenía una adorable hija. Pronto me involucré con una famosa estrella del cine: "la chica de la portada de Time", como popularmente era conocida en aquellos días - Parveen Babi.

En la oficina principal del Ashram de Rajneesh habían advertido a los sannyasis en contra de U.G. Después de haber conocido a U.G. muchos devotos cercanos de Rajneesh habían abandonado el Ashram. Recuerdo que por aquellos días Rajneesh dio cuatro charlas en contra de U.G., llamándolo de muchas maneras. "U.G., no has dicho ni una sola palabra en respuesta de los repetidos ataques que Rajneesh te ha hecho, ¿por qué? También he notado que no dices nada en contra de ningún otro gurú en particular", pregunté. Su respuesta fue algo inesperado:

"Los gurús tienen un rol social, así también las prostitutas. Desafortunadamente, en la sociedad, lo que los gurús ofrecen no es solamente socialmente aceptado sino también considerado como la meta suprema de nuestra existencia. Lo ofrecido por las otras no. Tú eliges lo que más te convenga..."

Desde que tenga memoria, siempre le tuve temor a la oscuridad y todavía lo tengo. Cuando estoy solo en casa o en un hotel, simplemente no puedo dormir en la oscuridad. Desde las oraciones que mi madre me enseño hasta las explicaciones y técnicas dadas por hombres santos y psicoterapeutas, todas han fallado en liberarme de esta fobia. Cuando planteé mi problema a U.G. el dijo:

Todas las fobias de las que los psicólogos tratan de liberarte son esenciales para la supervivencia del organismo viviente. La sociedad quiere liberarte de estos temores para usarte para sus propias necesidades... Si no tienes un temor, tendrás algún otro temor.

Conozco a un famoso productor de cine de Estados Unidos cuya fobia eran los gatos. Siempre que me visitaba se aseguraba de que no hubiera gatos alrededor. Un día este hombre que se avergonzaba de su fobia y había visto a todos los psicólogos en América, me contó su problema. El pensaba que algo andaba mal con él. Descansó cuando le dije que no había necesidad de que tratara de liberarse de su fobia. Esto acabó con su problema. Entonces, ¿qué hay de malo en que tú le temas a la oscuridad?

Sus palabras me liberaron de la búsqueda de una solución para terminar con mi fobia. Todavía le temo a la oscuridad pero ¡ya no temo a mi temor a la oscuridad!

Entre aquellos que vinieron ese día a verle estaba un caballero que tenía conexiones con muchas instituciones y era presidente de una organización dedicada al trabajo social. Él le preguntó a U.G. "Usted no parece sentir amor por su prójimo, ¿le son indiferentes la pobreza y el sufrimiento que hay a su alrededor? Su enseñanza no tiene ninguna utilidad práctica para la humanidad." La respuesta de U.G. fue directa:

Usted es un solo hombre bueno enceguecido por la idea ilusoria de hacer el bien a los demás, ¿Para qué es bueno un hombre bueno? ¿Qué le hace creer que debe vivir para hacer el bien a los demás? Vivir para hacer el bien a los demás es una actividad egocéntrica y egoísta de su parte, usted no es lo suficientemente honesto para admitirlo. Le llama a servir a la humanidad una misión de vida. Usted ha sido ampliamente recompensado por servirle a su país. El servicio humanitario es sólo una abstracción. La muerte también pondrá sus heladas manos sobre usted. Sabe perfectamente que también hay para usted un final. Ese es el porqué proyecta permanencia en la humanidad luchando contra todo cambio. La creencia de la eternidad de su alma y la vida futura también nacen de la misma fuente.


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De: x-x-loly_ta-x-x Enviado: 26/10/2003 21:55

Un parapsicólogo intervino "¿tiene algún comentario que hacer acerca de la clarividencia, la clariaudiencia, la percepción extrasensorial y los fenómenos psíquicos? U.G. asintió y dijo:

El hombre es una de las especies en este planeta que ha heredado estas cosas en común con todas las otras especies. El hombre en su ansiedad de mantener su identidad inexistente e ilusoria ha estado usando el pensamiento para traducir las percepciones sensoriales. Ahora los yoguis nos han prometido regresarnos estas cosas haciendo de todo eso un negocio.

Déjeme darle un ejemplo de cómo es esto tan efectivo en los animales: en Suiza allá donde vivimos en los Alpes, la caza de siervos es permitida cada año desde el 16 de septiembre. ¿Puede usted creer que el 15 de septiembre todos los años hordas y hordas de siervos bajan de todos los lugares a la seguridad de un santuario animal que queda al lado de nuestra casa? ¿Cómo puede explicarme este fenómeno?

'U.G. es el hombre más radical que he conocido', dijo mi amigo escritor Sujit Sen. El había estado viendo con ojos de halcón todo lo que U.G. hacía y decía. Había venido por insistencia mía conocer a U.G. renuentemente, vacilante y de mala gana. Sujit es un intelectual desprovisto de cualquier aspiración religiosa o espiritual. Es un izquierdista que fue una vez miembro de un grupo terrorista que no logró sus metas revolucionarias. Ahora está lleno de amargura. Su vida no tiene ningún propósito, y está sumergido en la rabia y la frustración. Sujit preguntó, '¿tiene algún propósito la vida, U.G.?' '¿Por qué habría de tener la vida algún propósito o significado?', respondió U.G. 'Tenemos que agarrarnos de algo para evitar desaparecer. O si no fuera así, ¿por qué más bien no suicidarnos?', Sujit persistió. U.G. dijo:

¿Tienes el coraje para hacerlo? ¡Ve y hazlo! No olvides que si fallas en tu intento te perseguirá la ley. No tienes el coraje para vivir. No tienes el coraje para morir. Sin embargo no tienes ningún reparo en dar tu vida en nombre de la libertad o el comunismo o por cualquier cosa que sea de tu gusto en particular. O puedes también darle un nombre y una filosofía a esa cosa llamada desesperación y comercializarla. Eso podría llevarte a ser el centro de la atención pública.

Dijo Sujit, 'Esto no es materia de mofa. Chiste aparte, déjeme hacerte una pregunta que es de gran importancia. El fin de la civilización parece ya a la vuelta de la esquina. Nuevas armas amenazan nuestra existencia... ' U.G. lo interrumpió diciendo, '¿No es raro que estés hablando de suicidio en un instante y en el otro estés hablando del holocausto nuclear? Sujit contestó, 'Por paradójico que te parezca, el hecho es que la humanidad también parece haber optado por el suicidio' Esta discusión realmente encendió a U.G.

Sus mentes son tan amenazantes, son tan peligrosas para el futuro de la humanidad como las mismas armas nucleares. La bomba de hidrógeno tiene origen en la quijada de burro que el cavernícola usaba para matar a su vecino. Ahora los hombres civilizados están haciendo lo que el cavernícola hacia, pero ustedes lo hacen 'por el bien de la humanidad'. Aquellos que todavía sostienen que tienen toda la razón de su lado y que su benefactor eterno acabará con el mal de los otros, ellos són los verdaderos enemigos de la humanidad. No importa cómo el mundo se destruirá a si mismo - con una bomba que tenga la insignia de franjas y estrellas o la del martillo y la hoz, o la luna creciente o una estrella judía o el chackra Ashok.

Sujit enmudeció. En este punto un político interrumpió a U.G. para preguntarle, 'Si la humanidad debe ser salvada del caos de su propia invención, ¿qué rol puede jugar la India en restaurar la paz para la humanidad?, ¿Puede la herencia de la India tener algún valor para la humanidad?' La respuesta de U.G. fue,'Perdóneme pero la India no tiene ni poder espiritual ni material para ser de alguna ayuda para la humanidad'. Toda palabra que dijo U.G. aquel día tenía un sentido de finalidad. Yo pregunté '¿Es posible prevenir la catástrofe de algún modo cambiando o mejorando la naturaleza humana?' Lo que me dijo fue algo que yo no había pedido:

El hombre es meramente un ser biológico. No hay lado espiritual en su naturaleza. Todas sus virtudes, principios, creencias, ideas y valores espirituales impuestos en ti por la cultura son meras afectaciones. Éstas no han tocado nada en ti. La religión explotó por siglos la devoción, la piedad y el fervor del hombre religioso. No en 'ama a tu prójimo como a ti mismo', sino en el terror de que si tratas de matar a tu prójimo también serás destruido con él, es donde yace el futuro de la humanidad. Por cuánto tiempo, eso nadie lo sabe.

Las heridas de una traición sexual dejan cicatrices duraderas. Una famosa estrella cinematográfica le hizo una insinuación a la mujer con quien yo estaba viviendo en esos días. Estaba furioso. Cada célula de mi cuerpo vibraba de celos. Quería estrangular al hombre y a mi novia. Luché fuertemente contra mis arrebatos emocionales pero pronto me di cuenta que era una batalla perdida. 'El amor es incondicional' dijo Rajneesh. La frase estaba escrita allí en la pared. La máxima de mi gurú no estaba funcionando en mi vida. Fue ahí cuando corrí donde U.G. y le pregunté, '¿es posible que me libere de los celos y al mismo tiempo pueda tener sexo, placer, compañía e intercambiar ideas y opiniones con mi novia? U.G. dijo:

Querer matar a ese hombre y a esa mujer es algo natural. Esa es una reacción saludable. Si tú sintieras algo diferente por alguna razón religiosa o de otra causa, ahí si habría algo mal en ti. Tú eres un hombre enfermo, lo que la cultura ha hecho en ti desafortunadamente te ha convertido en un hipócrita. Cuando alguien coquetea con tu novia o cuando sospechas infidelidad estás condenado a ser torturado por los celos, por el odio y por la agonía que llevas dentro. Si algún feo santurrón del mercado te dice que es posible, que hay una salida, que puedes liberarte de los celos y qun así tener sexo y todo lo demás, te esta tomando el pelo. Perdóname pero no me puedo tragar ese cuento. Si los celos se van, también lo hace el sexo. Si puedes hacerlo posible sin volverte loco, ¡que tengas suerte!

Siempre que iba a ver a U.G. mis procesos mentales eran derrotados. Yo iba a U.G. para obtener ayuda y lo que conseguía era desesperanza. Lo desesperado de mi situación era como la historia de un hombre perdido en una selva oscura que esta sufriendo mucho a causa de una espina clavada en su pie. Tienta a su alrededor y encuentra otra espina para remover la espina que lo tiene en agonía. En vez de liberarse de la primera espina, se encuentra con que ahora tiene clavadas dos espinas en vez de una. Allí estaba yo con dos espinas clavadas - celos y desesperanza. Había llegado a un callejón sin salida. Quizás la única salida de ese sentimiento de total desesperanza y desesperación era una acción imprudente.

Eran las dos de la mañana cuando este hombre borracho, yo, caminaba hacia la casa de U.G. y tocaba el timbre de su puerta. U.G. abrió y recuerdo lo que le dije, 'Quiero matarte. ¿Por qué diablos tuve que conocer a alguien como tú?. No importa sobre que tema yo empiece, siempre termina en desesperanza.'
U.G. dijo 'Por qué no te vas a dormir Mahesh. Ahí hay un sofá y una manta. Si quieres matarme, será mejor si esperas hasta mañana cuando haya gente alrededor. Entonces puedes hacer un gran ritual de todo el asunto.' Unos minutos después le estaba dando las buenas noches y besándole su mano le dije "U.G., te amo.' Ese fue el comienzo de mi historia de amor unilateral con U.G.

Mientras los días iban pasando en su compañía, me di cuenta de que la sagacidad de este hombre no fue adquirida con años de aprendizaje y de experiencia. Lo que surgía de él no parecía ser elaborado. Había algo indefinible en él. Tenía una peculiar calma que parecía afectar a la gente que iba a verlo. La paz que irradiaba no era algo obstaculizador. Se filtraba dentro de uno. ¿Cuál era su origen? ¿Cómo y por qué medios se había U.G. tropezado con este 'estado' de ser? ¿Había sido su vida una preparación para ello? Estas preguntas comenzaron a inquietarme. Y luego un día, me contó la historia de su vida y de su búsqueda.. .



 
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