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Hoy, os propongo un mundo de sensaciones extrasensoriales, donde solo hay fantasía y placer, siempre busco sensaciones nuevas y os aseguro que hay todo un mundo por descubrir.

Un día , vi.en la tele un reportaje sobre masaje tántrico y me pareció francamente fascinante, y ami me gusta aprender de los mejores, a si que me fui a Tailandia.

Se llama Harin y es una institución sobre sexo tántrico, me informé bien sobre él y me presenté en su local.

El es como un Apolo griego, osea que está buenísimo, yo siempre practico sexo tántrico durante horas, pero lo que aquel tío me enseñó, hará las delicias de todos aquellos que caigan en mis manos.

Un masaje digamos normal, se aplica sobre los músculos del cuerpo, el tántrico se da sobre los sentidos y especialmente sobre las terminaciones nerviosas de la piel.

Es un masaje cuerpo a cuerpo, tremendamente excitante que no os debéis perder .

Entré en una salita con poca luz, decorada con elementos asiáticos, sonó un gong y música espiritual a la vez que entraba mi maestro.

Pelo castaño, ojos marrones, alto y con un cuerpo para el pecado, una sonrisa traviesa salió de mis labios y me tumbé en la cama con solo una minúscula toalla, mientras él me iba explicando como funcionaba todo aquello.

La norma de este masaje tan diferente es que no puedes tocar a la persona que te lo da, ni puedes tener sexo explicito, uffff a mi me pareció más una tortura porque yo necesito tocar a la persona que me de placer, pero estaba dispuesta a soportarlo.

Lo que si se puede hacer, es correrte, menos mal, porque yo soy multiorgásmica y me puedo correr solo con tocarme.

El , ya estaba desnudo cuando sentí como la toalla resbalaba por mi cuerpo, despacito, para darle tiempo a él a disfrutar de cada rincón que la toalla dejaba al descubierto y su sonrisa se volvía cada vez más lujuriosa.

Sentí sus dedos en mi nuca, haciendo circulitos para activar mi relajación, sentí resbalar sus manos por mi espalda, impregnadas de algún tipo de aceite , compuesto por las delicias terrenales de Tailandia.

¡¡¡¡Aquello era…….PROMETEDOR!!!!

Subía y bajaba por mi espalda , hasta llegar a mis hombros y me rozaba los pechos haciéndome sentir escalofríos.

Se subió a la cama y se tumbo encima de mi, rozando su piel con la mía , mmmm

No se me puso el vello de punta porque no tengo,¡¡¡que maravilla!!!!

Se frotaba contra mi, con cada parte de su ardiente cuerpo, dándome un placer jamás conocido, noté su polla empalmada rozando mi culo y creí morir de gusto, mi instinto hacía que me levantara para sentirla dentro , el me la frotaba una y otra vez y yo empecé a sentir rabia por la tortura tan placentera a la que me estaba sometiendo.

Notaba como mis flujos resbalaban por mi ingle, cuando me dijo en susurros:

------¡¡¡Date la vuelta , DIOSA!!!

Me tumbé boca arriba, pensando como iba a aguantar las ganas que tenía de tocarle, se colocó detrás de mi y me incorporó de manera que mi cabeza quedaba bajo su cuello y sus manos llenas de aceite fueron a mis pechos, ¡¡¡UFFFFFFF!!!!

Las reacciones de mi piel, surgieron en cadena, mis pezones estaban empitonados y mi coño mojado, noté su polla pegada a mi espalda y sus manos en mis tetas, haciéndome hervir la sangre hasta límites insospechados, me las masajeaba con armonía y destreza, deleitándose en mis pezones con sus nudillos, provocando la salida de mis jadeos.

Con voz rota por el esfuerzo, me dijo que toda yo estaba hecha para disfrutar y para dar placer.

Cuando se cansó de torturarme las tetas, yo estaba al límite, solo pensaba en meterme aquella polla en la boca y comérmela entera.

Me apoyó de nuevo la cabeza en la cama y se tumbo encima de mi pero al revés, como para hacer un 69,¡¡¡uffffff!!! Solo la postura ya me ponía a mil, el tío se deslizaba por mi cuerpo, lentamente, frotando y quemando mi piel, me daba besitos en el pubis, en la ingle, sus labios eran tan suaves y calientes que derretían cada centímetro de piel, no pude aguantar más y un sonido gutural salió de mi garganta anunciando lo que venia y cuando frotó su pierna contra mi sexo resbaladizo, los latidos del corazón bajaron hasta mi coño y lo sentí palpitar, me corrí sintiendo como mi cuerpo se elevaba hacia otra dimensión totalmente desconocida y nunca imaginada.

Él clavó sus ojos en mí, para deleitarse con cada uno de mis espasmos y con su sonrisa me dio a entender que se sentía superior al haber dado tanto placer a una diosa como yo.

Me quede tumbada boca abajo en la cama, sintiéndome placenteramente muerta, jamás había experimentado tan maravillosas sensaciones, sin tocar a la persona.

Creo que me quede dormida, cuando sentí otras manos diferentes en mi culo.

Era Maila, la guinda del postre, tenía un cuerpo de escándalo y los ojos rasgados, una melena larga para hacerme cosquillas y unas manos que hicieron reírme de la tortura anterior, era …sencillamente majestuosa, se tumbó encima de mi y se deslizó por mi cuerpo como una sirena, me frotaba con sus brazos y me rozaba con las piernas, sentí sus duros pechos en mi culo, frotándose con lujuria y se me hacia la boca agua, movía con agilidad felina sus tetas por cada rincón de mi y yo me moría por lamérselas.

¡¡¡Que agonía más rica!!!

Con una suave indicación, me giró de cara a ella, mi corazón latía a mil por hora y mi coño parecía una piscina, se tumbo encima, despacio muy despacio y diciéndome con sus profundos ojos, ¡¡¡¡Te vas a enterar de lo que es bueno nena!!!

Sus pechos se pegaron a los míos, haciéndonos casi daño por la dureza de nuestros pezones, sus brazos bajaban hasta mis caderas, rozándome la ingle y yo me quería correr de gusto, quería su lengua en mi coño y sus dedos en mi culo, quería morderle los pezones y gritarle;

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-------¡¡¡¡QUE BIEN LO HACES, PUTITA!!!

------¡¡¡QUIERO CORRERME EN TU LENGUAAAAAAAA!!!!

Pero las normas de aquel tormentoso placer, había que respetarlas y me concentré solo en disfrutar.

Maila, seguía en trance, nuestros cuerpos sudorosos y resbaladizos, se contoneaban y arqueaban, buscando más placer y dando erotismo en estado puro, su larga melena, producía un efecto electrizante en mi piel, haciéndome cosquillas y excitándome hasta el limite, sus piernas se entrelazaban con las mías y yo gemía ante el ardor que me suponía meterme entre ellas e imaginar mi boca metida en sus hinchados labios y absorber sus calientes jugos, me moría por saborear su clítoris endurecido y por meterle los dedos por aquel culo abierto, que me tentaba como lo más prohibido, sentía como mi coño hervía de ganas de ser follado y sentí rabia por no poder dar rienda suelta al volcán en erupción que tengo por cuerpo.

Ella vio que estaba al limite, por el tono de mis agonizantes gemidos y con un movimiento magistral, juntó su coño ardiente con el mío, ninguna de las dos teníamos vello, lo que hizo tocar piel con piel, cuando sentí el fuego que su sexo desprendía, se me nubló la mente, frotó muy sutilmente, labios contra labios, clítoris contra clítoris, las dos sentimos como se abría el cielo y una ráfaga de estrellas fugaces nos envolvían con sus colores,

El ardor de dos coños hambrientos, frotándose los fluidos calientes y resbaladizos, hizo que nos corriéramos a al vez gritando de pasión, dos cuerpos sudados y brillantes convulsionados por los espasmos del clímax y arrasados por el placer.

Estábamos rotas y exhaustas, Maila se levantó me dio un dulce beso en los labios y con una reverencia se marchó.

¡¡¡¡UFFFFFFFFF!!!! Fue una experiencia, única e irrepetible que me dejó fascinada.

Me vestí y salí a la calle, el aire fresco calmó el rubor de mis mejillas, pero aquello me había dejado mas caliente que cuando entré, tanto que pensé en follarme al primero que viese por la calle, necesitaba comerme una polla YA , y que me follasen el culo y el coño hasta reventar.

Empecé a mirar a los transeúntes y pensé en ti y en lo que te haría si te pillase ahora mismo. Mmmmmmmmmmm ¿ TE IMAGINAS? MMMMMMMM